Este aperitivo delicioso es también muy sencillo de elaborar. El relleno de pesto puede prepararse con anticipación (se conserva en la heladera, tapado, hasta dos días), pero conviene rellenar los tomates poco antes de servir.
PREPARACIÓN: 35 MINUTOS
COCCIÓN: 0 MINUTOS
Ingredientes:
135 g de hojas de albahaca fresca, lavadas y secadas
2 dientes de ajo medianos, finamente picados
½ cucharadita de sal, o a gusto
Pimienta negra recién molida, a gusto
60 g de piñones, tostados (vea Consejo, en la
página 262)
1 cucharada de aceite de oliva extra virgen
250 g de queso untable bajo en grasas, en trocitos
700 g de tomates cherry, lavados y secados
Preparación:
1. Coloque en la procesadora la albahaca, el ajo, sal y pimienta. Reserve 2 cucharadas de los piñones y agregar el resto a la albahaca. Procese hasta que los piñones estén triturados. Con la
máquina en marcha, vierta el aceite de oliva en forma de hilo. Añada el queso untable y pulse hasta lograr una textura lisa y cremosa.
2. Poco antes de servir,marque un corte en cruz en la parte inferior de cada tomate cherry, con un cuchillo serrado o uno para verduras filoso. Retire las semillas con cuchara o con los dedos, con cuidado, para mantener los tomates intactos.
3. Coloque el relleno de queso y pesto en una manga con boquilla estrella o una bolsita plástica con un orificio de 1 cm en una punta. Forme un copete de relleno en la cavidad de los
tomates. Decore con los piñones restantes. Una porción es unos tres tomates rellenos.
CADA PORCIÓN: 64 kcal, 2 g de proteínas, 0,6 g de fibra,
2 g carbohidratos, 5 g de grasas totales
(1,5 g saturadas), 8 mg de colesterol, 0,14 g de sal.