Inicio Historias Reales Aventura La familia Austríaca que inspiró la novicia rebelde

La familia Austríaca que inspiró la novicia rebelde

2634
0
la-familia-austriaca-que-inspiro-la-novicia-rebelde-5801-mainImage-0

Sus colinas siguen vivas. Esta es la historia de los von Trapp, la familia Austríaca que inspiró la novicia rebelde.

Voy en camino para ir a almorzar con Johannes von Trapp, el hermano menor de los famosos cantantes von Trapp, la familia austríaca en la que se basó el exitoso musical La novicia rebelde. Doce de los von Trapps se establecieron en la ciudad de Stowe, Vermont, Estados Unidos, después de que la familia abandonó su casa en Salzburgo, hace más de 80 años. 

Publicidad

—Claro, me encantaría mostrarte el lugar —me dijo Johannes cuando hablamos por teléfono.

A sus 81 años y cerca de jubilarse, Johannes sigue ayudando a supervisar el Trapp Family Lodge, la estancia turística que construyó la familia en Vermont después de llegar a los Estados Unidos.

He venido bien preparado. Mientras manejo a través de las montañas boscosas del norte de Vermont, pongo «The Sound of Music» en el reproductor de CD de mi auto. Luego, empiezo a cantar la melodía —desentonando, como siempre— junto con Julie Andrews: «Las colinas están vivas con el sonido de la música. Con canciones que han cantado durante miles de años…»

Veo un cartel de la Trapp Family Lodge, que se ubica en una ladera empinada. Minutos más tarde me encuentro con Johannes, un hombre delgado, de ojos azules y de 1.80 m de altura. Es fácil imaginarlo cuando era más joven, vestido con atuendos austriacos, cantando con sus hermanos y hermanas.

Sonríe con gracia cuando confieso que he estado estropeando la canción del musical que hizo famosa a su familia en todo el mundo. 

—Recibimos mucho de eso aquí arriba —me dice mientras cada uno bebe una cerveza von Trapp Dunkel en el Bierhall de la cervecería von Trapp.

Johannes dice que algunos de los fans más entusiastas de la película vienen a la estancia familiar de estilo alpino y esperan que los reciban siete niños cantando «Do-Re-Mi». 

—La película tiene 60 años, pero todavía recibimos visitas que entran en el hall y preguntan, “¿dónde están los niños cantores von Trapp?” —se ríe y añade— Es como si creyeran que jamás crecimos o que nos congelamos en el tiempo.

Como si fuera una coincidencia, un visitante se acerca a nuestra mesa y se dirige a Johannes: 

—La novicia rebelde es mi película favorita de todos los tiempos —y le pide un autógrafo y una selfi.

—¿Ves a lo que me refiero? —me dice Johannes mientras sonríe efusivamente.

—Por lo menos no me pidió que cantara.

 

La novicia rebelde ha sido llamada “el musical favorito del mundo». En el lanzamiento de la película en 1965, el Hollywood Reporter la describió como «una de las grandes películas de todos los tiempos [que] restituye la fe en el cine». La película ganó cinco Oscars, su banda sonora ha vendido 20 millones de copias en todo el mundo, y ha sido vista por la asombrosa cantidad de más de mil millones de personas. Hoy en día, es el musical más visto y la tercera película más exitosa de todos los tiempos, después de Lo que el viento se llevó y la Guerra de las Galaxias.

A pesar de que se ha producido gran cantidad de libros, artículos y documentales acerca de La novicia rebelde, se ha revelado mucho menos acerca de la familia austríaca de la vida real, en la que se basa la película. En la cinta, el capitán Georg von Trapp, un héroe naval austríaco muy condecorado, se niega a dejar que los niños canten en público; sin embargo, la verdad es que él y su segunda esposa, María, formaron un grupo de canto: el Coro de la familia Trapp, que se fue de gira por Europa durante 1937 y 1938.

Tanto en la película como en la vida real, los von Trapp, que estaban en contra de los nazis, se fueron de Austria después del Anschluss, cuando Austria fue anexada a Alemania. Georg había recibido instrucciones de aceptar una comisión naval alemana, y la familia decidió dejar su tierra natal. Como Georg le dice a María en la película: «Rechazarlos sería fatídico… y unirse a ellos sería impensable”.

Pero, en la famosa escena final de la película se muestra a nueve miembros von Trapp caminando a través de los Alpes rumbo a Suiza.

—Por supuesto que la familia se escapó de Hitler y de los nazis en 1938, el año antes de que yo naciera —comenta Johannes— pero nada más abordaron un tren en Salzburgo y se fueron a Italia y después a América.

—Entonces, ¿la escena climática no sucedió en realidad? —pregunto.

—Digamos que esa fue la versión de Hollywood — dice Johannes con sus ojos azules centelleantes.

—Si nuestra familia hubiera caminado por las montañas de Salzburgo hubiera terminado en Berchtesgaden, Alemania, cerca de El Nido del Águila, el refugio de Hitler en la cima de la montaña.

Hace una pausa para continuar, sonríe con calidez, y agrega: —Pero, hace más dramática la historia, ¿no es cierto?

 

Dramática, es cierto. Pero, también lo es la historia de la vida real de la familia después de Europa. Una vez que dejaron Austria, cuando María estaba embarazada de Johannes, la familia von Trapp llegó a los Estados Unidos en 1939 con menos de cuatro dólares. Georg había perdido su fortuna en una quiebra bancaria, pero la familia prosperó en una prologada gira de conciertos a través del país.

El público amaba a la familia austríaca que vestía sus trajes típicos e interpretaba música tradicional. Como señaló el New York Times: “había algo inusualmente adorable sobre esta agrupación familiar”. Con el tiempo la familia completa de 12 miembros se convertiría en la “atracción con más reservaciones en la historia de conciertos de los Estados Unidos”. En 1942, la familia se instaló en Stowe, un poblado de esquí y un centro de veraneo que se estableció en 1794. Compraron una casa de granja en ruinas y 267 hectáreas de tierra que se jactaba de tener unas vistas fenomenales de las montañas de Vermont Green y Worcester, que dejan sin aliento. Les recordaba a Austria. 

Dos de los hermanos, Rupert y Werner, se alistaron en el ejército y sirvieron en la 10ª División de Montaña como soldados de esquí. Otros miembros de la familia se casaron y se mudaron; uno trabajó como profesor, otro se volvió misionero y otro fue médico.

Georg murió en 1947 y los Cantantes de la familia Trapp se disolvieron en 1956, después de haber actuado en más de 2.000 conciertos en 30 países. Quienes se quedaron en Stowe ayudaron a María a administrar la casa de familia de 27 habitaciones y la estancia turística.

María, para ayudar a mantener a la familia después de que murió su esposo, escribió la biografía familiar y vendió los derechos por menos de 10.000 dólares a un editor alemán, quien hizo dos películas sobre los von Trapp. A su vez, este editor vendió los derechos (por mucho más) a Richard Rogers y Oscar Hammerstein, quienes la usaron como base para su musical de Broadway. 

—¡Todo cambió y cuando digo esto, me refiero a todo! —recuerda Johannes. 

Gracias a su éxito mundial, los von Trapp y, sobre todo María, quien fue representada por Julie Andrews en la película, se convirtieron en celebridades en un instante. La estancia turística prosperó.

Hasta su muerte en 1987, María fue la cara pública de la familia; concedió innumerables entrevistas y apareció en programas especiales de televisión.

—Ella era la fuerza conductora que nos mantenía unidos durante tiempos difíciles —dice Johannes. Mary Martin, quien interpretó a María en Broadway, dijo refiriéndose a ella: “La familia no solo escaló esa montaña para escapar. Ella los empujó durante todo el camino hasta llegar a la cima.”

A medida que me uno a Johannes para dar un paseo por las tierras de la estancia turística, que fue reconstruida en 1980, después de que se incendiara la original, él asevera que la publicidad que generó la película fue una “bendición mezclada”.

—No me malinterpretes —explica— La novicia rebelde es una película fabulosa, un tour de force que resuena para mucha gente; pero, la verdad, no representa con precisión a mi familia. Por ejemplo, mi padre no era el severo y demandante rigorista que se presenta en el filme. Era mucho más cariñoso, informal y cuidadoso. Además, la música que interpretábamos era, bueno, un tanto más sofisticada que “Do, un ciervo, un ciervo hembra”.

El pianista de la estancia sabe que debe estar atento a la presencia de Johannes, quien le ha dicho: “Por favor, nada de ‘Do-re-mi’ o Edelweiss’ cuando yo esté por aquí”. Los huéspedes piden canciones del musical, y el pianista se las concede. No obstante, si ve a Johannes´, cambia de melodía con rapidez y empieza a tocar su favorita, ‘Desperado’ de los Eagles.

Todos sus hermanos han fallecido, excepto sus hermanas Rosemarie, de 91 años y Eleonore de 88, que viven en la zona. Ha dirigido la estancia turística desde 1969.

—Nunca quise convertir este lugar en un parque temático de La novicia rebelde —comenta—. He intentado que refleje los valores de mi familia.

Fiel a sus raíces, Johannes construyó un centro de esquí en la estancia y estableció una cervecería exitosa que ofrece las clásicas cervezas austríacas, del sur de Alemania y de Bohemia.

—Sabía que no podíamos confiar toda la vida en la película para seguir teniendo huéspedes que pagaran —explica.

Hace poco, Johannes entregó gran parte de sus responsabilidades administrativas a su hijo Sam y su hija Kristina. Los hermanos decidieron instaurar un tour histórico que cuenta la historia tanto de la familia como de la película.

—Crecí con una actitud engreída con respecto a la película, así que la mantuve a la distancia, —admite Sam. 

—Pero, no tardé mucho tiempo en descubrir que es muy importante para muchas personas.

Recuerda a un empleado de una aerolínea quien reconoció su nombre y le dijo que La novicia rebelde había influido en su decisión de dejar un trabajo muy lucrativo para volver a casa a cuidar a su madre enferma.

—Dijo que la película le había mostrado lo importante que era el amor de la familia —recuerda Sam.

—Escuchamos comentarios similares a ese todo el tiempo. Nunca nos deja de sorprender que la película, y la historia de nuestra familia, hayan tenido una influencia tan positiva en la gente. Nos reveló que ser un von Trapp es un privilegio.

Aunque la película puede atraer a algunas personas a la estancia, la familia cuenta con clientes que regresan año tras año debido a las actividades al aire libre que ofrece el lugar, desde el ciclismo de montaña hasta el esquí de fondo y el senderismo. Los turistas siempre preguntan: ¿Sam o su hermana cantan? Sam, un destacado esquiador y ex modelo se estremece un poco y dice: “Mi padre y mi madre son grandes cantantes, yo no tanto”.

Johannes, sentado en el concurrido Bierhall, admite que también ha cambiado su opinión con respecto a La novicia rebelde, a lo largo de los años.

—Me he suavizado. Me doy cuenta de que la película no tenía la intención de mostrar una historia realista, y he llegado a apreciar que expresa temas universales como el amor a la patria, el amor entre un hombre y una mujer, el amor a la familia y mucho más. Además, ha significado mucho para gran cantidad de personas.

—Hay una historia que he contado acerca de… —se detiene a mitad de la frase, se limpia una lágrima y explica: —cada vez que cuento esta historia, me emociono. Discúlpame. Resulta que Johannes estaba visitando a su madre, María, en el Trapp Family Lodge una tarde de otoño en la década de los años setenta. Estaban sentados en su balcón, que daba hacia el cementerio privado de la familia, a unos 60 metros de distancia.

—Hacía poco habíamos cercado el cementerio de la familia porque los visitantes habían pisoteado las flores. De repente vi a un hombre trepar por la cerca y pensé, “no otra vez, ¿qué está haciendo?” —vuelve a hacer una pausa, parpadea para no dejar caer un lagrima y sigue: —me di cuenta de que estaba usando un uniforme blanco de servicio. Era un oficial de la Marina de los Estados Unidos. Se acercó a la tumba de mi padre, se quedó parado allí en posición de firmes y saludó. Luego, se volvió a trepar por la cerca y se fue caminando.

—Estaba profundamente conmovido. Es más, me quedé sin palabras, —recuerda Johannes. —Me di cuenta de que, si no hubiera sido por La novicia rebelde, la historia de mi padre no sería tan conocida como lo era entonces y los sigue siendo ahora. Eso significa muchísimo para nosotros. 

Artículo anteriorUna vida plena después de los 60
Artículo siguienteCambie la cara a sus ambientes sin pintar