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Pros y contras del helado

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Todos amamos el helado, pero sabemos que no es de los alimentos más saludables para el organismo… ¡ni para la dieta! Enterate todo lo que nadie te dice sobre el helado y cómo podés darte un gustito sin abusar.

Beneficios:

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– Fuente de calcio.

– Es digestivo y aporta proteínas, calorías y vitaminas durante una enfermedad.

Desventajas:

– Alto contenido de grasas saturadas y azúcar. 

El helado contiene un mínimo de 10 % de crema, leche o manteca. Los fabricantes le agregan otros ingredientes y aire para incrementar su volumen. En general, los helados más baratos contienen el 10 % mínimo de grasas y la cantidad máxima de aire, mientras que las marcas de calidad contienen más grasas y menos aire. Las grasas son las que le dan al helado la textura suave; los helados de bajo contenido graso o los yogures helados compensan la falta de grasas con un incremento de azúcar (casi el doble) y se los bate poco para reducir el volumen de aire. Aunque esos productos contengan menos grasas, su contenido calórico puede no ser menor que el de los helados cremosos. Tanto los helados con bajo contenido graso como los de agua tienen de 3 a 10 % de grasas y de 30 a 50 % de aire. Los helados de agua suelen elaborarse con una pequeña cantidad de grasas lácteas y sólidos también lácteos y, a veces, con clara de huevo. 

Por otra parte, los helados de frutas se elaboran con la pulpa o el jugo de la fruta, azúcar y agua, y en ocasiones se les agrega pectina o ácido ascórbico. Las calorías de estos productos varían considerablemente. El helado contiene calcio, proteínas y pequeñas cantidades de vitamina A y riboflavina. Pero el precio que se paga por esos nutrientes es una cantidad considerable de grasas saturadas, con el riesgo concomitante de padecer enfermedades cardíacas y algunos tipos de cáncer. Los helados de fruta, que son ricos en azúcar pero no contienen grasas, son una mejor opción. El yogur helado de bajo contenido graso es un buen sustituto del helado; media taza de yogur helado acompañado de frutas frescas y decorado con germen de trigo tostado satisface el deseo de comer helado y provee a la vez calcio, vitaminas y fibras.

Aditivos 

La refrigeración del helado presenta el problema del “shock térmico”. Cuando se saca el helado del freezer, la superficie se derrite, y al volver a congelarlo, se forman cristales de hielo. Este problema se soluciona si se le agrega al helado diferentes aditivos permitidos que absorben el agua e impiden que se formen cristales. La goma guar o la garrofín, ambas productos vegetales, suelen utilizarse con ese propósito. Otros aditivos comunes son los emulsionantes como la lecitina, monoglicéridos y diglicéridos; o polisorbatos, que le confieren al helado una textura suave al disipar los glóbulos de grasa.

 

¿Sabías que un cucurucho puede contener tantas calorías como una comida? 

Vale la pena fijarse en cómo armamos nuestro helado. Comé helados comunes y no los comercializados como “premium”; eligí vasos pequeños en lugar de potes o cucuruchos; preferí una sola bocha de helado en vez de dos o tres; y evitá agregarle otros ingredientes por más tentadores que sean (chocolate, caramelo, salsas; chips de chocolate, nueces o crema batida). Con esos agregados, el helado suma de 75 a 100 calorías más. Y tené cuidado con el tamaño de vasito que elijas, que puede agregar más calorías. Lo que comenzó como un postre de 110 kcal puede terminar teniendo tantas calorías como una comida. La información sobre las calorías y el contenido graso puede leerse en el envase de las marcas conocidas, a diferencia de los helados comprados en una heladería.

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