¿Comió una porción de pizza pepperoni de más? Por suerte existen estas hierbas que lo ayudarán a componerse del ardor y malestar que provocan la indigestión
¿Qué causa la indigestión?
También conocida como dispepsia, la indigestión comprende una amplia variedad de síntomas, en su mayoría producidos porque los alimentos no descienden por el tracto digestivo con la fluidez y facilidad que deberían. Se pueden experimentar náuseas o sensación de ardor, también dolor abdominal o hinchazón. Otros factores desencadenantes pueden ser comer demasiado o hacerlo rápido, o contar con un nivel excesivo o insuficiente de ácido en el estómago.
¿Qué hierbas son buenas para la indigestión?
- El jengibre se usa desde hace mucho tiempo para calmar molestias estomacales y aliviar las náuseas. Si bien no se sabe con certeza cómo funciona, se ha comprobado que mejora la digestión y posee propiedades antiespasmódicas, lo que lo convierte en un remedio efectivo para el tratamiento de calambres estomacales. Puede consumirse fácilmente en forma de cápsulas: tome dos cápsulas de 250 mg después de comer (Precaución: no consuma grandes cantidades de jengibre si toma medicamentos anticoagulantes). O bien, después de las comidas, coma unos trozos de raíz de jengibre confitada o una taza de té de jengibre tibio. Para preparar el té, vierta una cucharadita de jengibre fresco rallado en una taza de agua hirviendo, déjela en remojo diez minutos y luego filtre.
- La manzanilla también es un remedio milenario para el tratamiento de la indigestión. Se recomienda tomarla como té calmante; lo ideal son tres tazas por día antes de las comidas.
- Menta, ideal para un rato de relajación: El aceite de menta calma los calambres intestinales y ayuda a aliviar la inflamación abdominal. Se recomienda tomarlo en cápsulas de liberación prolongada. Tome una o dos, tres veces por día después de comer. También puede probar las cápsulas blandas de aceite de menta puro. Tome una cápsula tres veces por día antes de las comidas con un poco de agua (Precaución: si sufre acidez, la menta no es la alternativa más indicada, ya que puede empeorar los problemas de reflujo de ácido. Evite tomar medicamentos para la indigestión simultáneamente con el aceite de menta. Si toma ciclosporina, un fármaco para el tratamiento de la artritis reumatoide, consulte a su médico antes de consumir aceite de menta). Otra opción es terminar las comidas con una refrescante taza de té de menta. Coloque una cucharadita de hojas desecadas o un saquito de té de menta en una taza con agua hirviendo, deje reposar por diez minutos y luego filtre.
Otras opciones masticables
Ante síntomas de indigestión (o luego de haber comido en exceso, o un plato muy condimentado que pueda provocar indigestión), mastique bien y luego ingiera una cucharadita de semillas de hinojo o comino. Estas semillas contienen aceites que calman los espasmos intestinales, alivian las náuseas y ayudan a controlar las flatulencias. También puede preparar una infusión de semillas. Deje en remojo una cucharadita de una mezcla preparada con partes iguales de semillas de comino, hinojo y anís en 250 ml de agua hirviendo durante dos o tres minutos. Luego filtre y divida la mezcla en dos o tres porciones. Beba esta infusión durante el transcurso del día antes de las comidas. La raíz de regaliz produce efectos beneficiosos sobre el tracto digestivo, ya que recubre las paredes internas del esófago y del estómago, y así calma molestias estomacales e indigestión
El bicarbonato de sodio al rescate
Vierta una cucharadita de bicarbonato de sodio en un vaso con agua y bébalo. Esta solución neutraliza los ácidos estomacales y ayuda a aliviar el dolor producido por los gases. A veces el bicarbonato puede producir gas en el estómago, por lo que algunos expertos recomiendan agregar unas gotas de jugo de limón a la preparación para disipar parte del gas antes de que llegue allí (Precaución: no tome bicarbonato si sigue una dieta baja en sodio ya que posee un alto contenido de este elemento).
El ácido del vinagre también puede ayudar
Tome una cucharadita de vinagre de manzana disuelto en medio vaso de agua, especialmente después de haber comido en exceso o platos muy pesados. Esta solución lo ayudará a digerir la comida si no cuenta con suficiente ácido en el estómago. Puede agregar un poco de miel para endulzar.
Agua caliente a sorbitos
Algunos sostienen que beber una simple taza de agua caliente alivia la indigestión de manera tan efectiva como cualquier otra solución. También se cree que una bebida de jengibre a temperatura ambiente, una limonada o una bebida cola común pueden calmar las molestias estomacales. En caso de que la bebida tuviera burbujas de gas, revuelva enérgicamente hasta eliminarlas.