Primero, las malas noticias: una vez que se pierde audición, no se puede recuperar sin la ayuda de un audífono o dispositivo similar. Y ahora algo bueno: es posible preservar tu nivel de audición actual con estos 10 consejos.
Cómo cuidar nuestro sentido de la audición
Dejar de fumar y alejarse de otros fumadores
En un estudio publicado en la revista de la Asociación Médica Estadounidense se descubrió que cuanto mayor es la exposición al humo de cigarrillo, mayores son las probabilidades de experimentar pérdida auditiva vinculada con la edad.
Dar una caminata por el bosque
No solo el silencio te permitirá concentrarte mejor en los sonidos sino que, además, los investigadores descubrieron que las personas con buen estado físico tienden a tener un mejor nivel de audición que aquellos que no están en forma. ¿Cuál es el motivo? El ejercicio aeróbico lleva más oxígeno al cuerpo y mejora el flujo de sangre a los oídos.
No olvidar el guacamole en la próxima picada
Las paltas son frutos ricos en magnesio. Distintos estudios mostraron que un bajo nivel de magnesio puede aumentar la susceptibilidad a la pérdida auditiva inducida por el ruido.
Tomar un poco de cerveza o una copa de vino, sin excederse
Créase o no, beber en forma moderada puede ayudar a combatir la pérdida de audición vinculada con la edad. Sin embargo, cantidades excesivas pueden contribuir a la pérdida efectiva de la audición.
Elegir café descafeinado y sopas bajas en sodio: la cafeína parece interferir con el flujo de sangre al oído, mientras que la sal favorece la retención de fluidos, lo que puede causar hinchazón en los órganos funcionales del oído. Además, estudios mostraron que las personas con alta presión arterial son más propensas a sufrir pérdida auditiva vinculada con la edad.
No olvidar los tapones al usar la cortadora de pasto o practicar tiro
Si bien advertir que el estallido de un disparo puede afectar la audición es solo una cuestión de sentido común, diversos estudios demostraron también que la práctica de tiro a nivel recreativo puede dar lugar a una notoria pérdida de audición de alta frecuencia. Otros estudios detectaron un significativo aumento de pérdida auditiva en personas que llevan a cabo trabajos de carpintería como pasatiempo, o conducen motocicletas, motos de nieve u otros vehículos todoterreno.
Lavarse los dientes al menos dos veces por día y usar hilo dental después de cada comida
Por algún motivo, existe una conexión entre la cantidad de piezas dentales que se hayan perdido y la audición; los investigadores han descubierto que cuantos más dientes se conserven a medida que pasa el tiempo, mejor será el nivel de audición. ¡Las dentaduras postizas no cuentan!
Comer pan integral y sopa de arvejas partidas para el almuerzo
El salvado y las legumbres son excelentes fuentes de vitaminas B, un elemento que según muestran los estudios, protege las neuronas y los vasos sanguíneos conectados con la cóclea, un pequeño hueso que se encuentra en la parte interna del oído. Además, en un estudio publicado en la revista The American Journal of Clinical Nutrition se descubrió que las mujeres con problemas auditivos registraban bajos niveles en sangre de vitamina B12 y ácido fólico.
Comer cinco porciones de vegetales por día
Investigadores exploraron la conexión entre los distintos estilos de vida y casos repentinos de sordera en 109 pacientes que luego se compararon con personas con audición normal, y descubrieron que aquellos que comían mayor cantidad de vegetales frescos mostraban más bajo riesgo de padecer este problema auditivo.
Tomar un vaso de leche descremada todas las mañanas
El calcio y la vitamina D presentes en la leche son esenciales para mantener sanos los huesos del oído, especialmente la cóclea. En un estudio en el que participaron 70 mujeres sanas se descubrió que aquellas que experimentaban pérdida de audición mostraban una densidad espinal (medida de la fortaleza ósea) y niveles de ingesta de calcio mucho más bajos que aquellas con audición normal.