En un colon irritable los músculos intestinales tienen espasmos. Esto hace que la comida pase lento o rápido, lo que provoca dolor abdominal, diarrea o estreñimiento.
Cómo saber cuando tengo el colon irritable
Carlos B. despertó una mañana y decidió que no podía aceptar las palabras de su médico: “Simplemente tendrá que vivir con él”. Estaba harto de sentirse apenado por la diarrea, los cólicos y los mareos que se combinaban con el estreñimiento durante un período agitado, el cual podía ir desde una entrevista laboral hasta una cita amorosa. Decidió atacar él mismo lo que le habían diagnosticado como colon irritable.
Primero inició una dieta para eliminar los alimentos que su organismo no toleraba (como los lácteos). Luego avanzó combinando psyllium con salvado de avena. Finalmente, empezó a tomar las cápsulas de aceite de hierbabuena, y notó que casi habían eliminado el problema. “Estoy convencido de que todos pueden derrotar al colon irritable”, afirma. “Hay muchas opciones que la gente no conoce. Se llama ‘ser proactivos’. Después de todo, ¡usted es lo más importante para usted mismo!”.
Complementos para aliviar el colon irritable
- Aceite de hierbabuena
Dosis: 1 o 2 cápsulas, 3 veces al día, entre alimentos.
Nota: Tome las de capa entérica con 0,2 ml de aceite cada una; empiece con la dosis menor y aumente si es necesario. El aceite de las hojas y los tallos de la hierbabuena, en pastillas o líquido, ayuda a prevenir los espasmos intestinales. - Psyllium
Dosis: 1-3 cdas. de polvo disuelto en agua o jugo de naranja, al día.
Nota: Asegúrese de tomar mucha agua a lo largo del día. - Acidófilos
Dosis: 1 pastilla diaria, al desayunar.
Nota: 1-2 millardos de organismos por pastilla (si es posible); también se venden en polvo; pueden necesitar refrigeración. - FOS
Dosis: 2.000 mg al día.
Nota: Tómelos combinados con acidófilos; no surten efecto contra el colon irritable si se usan solos.
