La inteligencia de los perros, como sucede con los humanos, se puede potenciar a partir de la educación y el entrenamiento.
Los perros bien entrenados son más hábiles, se comportan mejor y son más divertidos. En realidad, parecer ‘inteligente’ en general simplemente refleja ‘entrenamiento’, por lo que será necesario invertir tiempo en practicar y en establecer una buena comunicación con su perro. Estas recomendaciones lo ayudarán a convertirlo en un can más astuto. ¿Cómo entrenar a mi perro?
1 – Entrenamiento temprano
Cuanto antes comience a entrenar a su cachorro, mayores serán las probabilidades de obtener resultados. Sesiones de práctica varias veces por día pueden marcar la diferencia. Recuerde mantener estas instancias como algo divertido. Contrariamente a lo que todos piensan, es posible enseñarle trucos nuevos a un perro maduro.
2 – Vincular palabras con recompensas
Los perros pueden comprender determinado rango de vocabulario, de manera similar a lo que entiende un niño de dos años. Puede enseñarle a asociar palabras con comportamientos, actividades y objetos mediante refuerzos positivos y recompensas. No es sorprendente que la mayoría de los perros puedan comprender palabras como ‘premio’, ‘juguete’ y ‘pasear’, porque cada vez que las escuchan se los recompensa con comida, con un juego o con una salida. Su perro constantemente capta palabras y señales; aproveche entonces esta capacidad y potencie su efecto con gratificaciones adecuadas.
3 – Señales con las manos
Por naturaleza, a los perros les gusta responder a indicaciones visuales. Señalar es un gran ejemplo: puede señalar un juguete y el perro lo buscará. Los perros se encuentran entre los pocos animales que comprenden ese gesto. Refuerce las órdenes que da con su voz mediante señales con las manos y el perro responderá rápido y con entusiasmo.
4 – Entrenamiento regular
Momentos cortos de entrenamiento en forma regular durante la vida de su perro darán excelentes resultados. El entrenamiento puede ser breve y espontáneo, lo que importa es que se practique en forma constante. Repase algunas órdenes simples con su perro antes de darle la cena. Es un momento en el que estará realmente predispuesto a responder
5 – Permitir que se esfuerce por su comida
A los perros les encanta comer, permítale entonces que trabaje para obtener su comida. Use una porción de la ración diaria del perro para practicar juegos divertidos. Puede hacer búsquedas del tesoro con alimento balanceado, usar juguetes que se rellenan con comida o jugar a las escondidas con premios. Todas estas actividades les permiten estar estimulados y entretenidos y mantienen activos sus cerebros.
6 – Enseñarle trucos
Los perros que aprenden a realizar trucos geniales siempre se ven inteligentes. Además del entretenimiento y la diversión, enseñarle este tipo de cosas lo ayudará a llevar la relación con su perro a un nuevo nivel. Comience con trucos simples como ‘dar vueltas’ y gradualmente amplíe el repertorio. No hay dudas de que enseñar trucos es divertido y gratificante tanto para los perros como para sus dueños.
¿Qué hago para entrenar a mi perro?
- Juegos mentales interactivos: Jugar a tirar cosas y que el perro las traiga de regreso es divertido, aunque no hay mucho pensamiento involucrado en la actividad. Los juegos mentales interactivos cansan al animal, reducen el aburrimiento y fortalecen el vínculo entre animal y dueño.
- Alimente su instinto de caza: Ate una soga al extremo de un palo largo y luego sujete un juguete blando a la soga. Llame la atención del perro balanceando el juguete frente a él. Deténgase y vuelva a comenzar. Esto incentiva la concentración del perro y lo deja a usted en control de la situación. Cuanto más lentos sean los movimientos, mayor desafío será para la mente del perro.
- Búsqueda del tesoro: Que el perro utilice su nariz para encontrar un tesoro escondido resulta muy estimulante para el animal. Para comenzar, indíquele que permanezca sentado y quieto. Luego esconda un premio o un juguete favorito en un lugar que resulte evidente. Hasta puede dejarlo observar mientras lo hace. Luego dé la señal para que vaya a buscar el objeto. Premie al perro cuando encuentre el tesoro escondido. Una vez que comprenda el juego, aumente la dificultad y esconda el tesoro en otra habitación o pídale a otra persona de la casa que lo haga.
