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Consejos para mejorar las relaciones

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Relacionarse con los que nos rodean no es fácil, por eso los consejos de Julio Bevione pueden ser de gran ayuda.

«No me considero envidiosa, pero últimamente me siento incómoda cuando veo que a mis amigos les suceden cosas que he deseado para mí. ¿Cómo puedo recobrar la paz interior y dejar de sentirme amenazada por sus éxitos? » Laura R.

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Estimada Laura:
Es normal que los seres humanos fluctuemos entre la admiración y la envidia. Todos experimentamos esta dualidad (unos más que otros). Ante todo, no se condene. Acepte lo que siente como una oportunidad de transformarse. Manténgase alerta cada vez que lleguen pensamientos que le generen malestar y conviértalos en inspiración. Es decir, reconozca que lo que ve y admira en ellos también está en usted, por eso puede verlo tan fácilmente. Le están mostrando, como en un gran espejo, sus posibilidades de triunfo. Y ese triunfo será posible en la medida en que use toda su energía para valorarse y confiar en la persona que usted es y en lo que hace. La vida suele anticipar lo que tiene para nosotros mostrándonoslo en los demás con el propósito de prepararnos para recibirlo. Agradezca, bendiga a sus amigos que lo inspiran y enfóquese en lo que quiere. A su tiempo, todo llega.

«Me cuesta trabajo establecer relaciones afectivas duraderas. He sufrido, pues, por distintas razones, mis tres parejas me han dejado, aunque nunca ha sido mi idea que nos separemos. También me cuesta crear lazos duraderos con amigos. ¿Qué me sucede? » Azucena L.

Estimada Azucena:
Ya sea de manera evidente o encubierta, los seres humanos tenemos alguna herida de abandono. La primera que nos marca es la que experimentamos al dejar el vientre materno. Se trata de una sensación de separación que a nivel subconsciente tenemos que sanar, y que seguimos poniendo en práctica con las relaciones que tenemos en el momento presente, recreando esa  misma sensación de pérdida y soledad. De igual forma, el abandonado también abandona por miedo a que lo dejen. Es por ello que no puede comprometerse con sus amigos en relaciones más profundas. Pero que alguien se vaya de nuestra vida no implica que llegue el sufrimiento. Aunque hay un dolor natural por el vacío, la despedida y el final de lo que habíamos imaginado posible, el sufrimiento de estos momentos está ligado a esa herida que se vuelve a abrir. Para sanarla, le sugiero que vuelva la atención hacia usted. Muchas veces, cuando un ser querido se va de nuestras vidas, el mejor regalo que recibimos es permitirnos dejar de mirar hacia fuera para mirarnos a nosotros mismos. Para escucharnos, validarnos y estar más pendientes de nosotros. Si realmente se “está con uno mismo”, no habrá ausencias que la hagan sufrir. Luego, se animará a entregarse a una relación sin que el final sea una amenaza que impida relacionarse en paz.

«Mi esposa me pide atención constantemente. Yo trabajo mucho para darle a mi familia, incluyendo a mis hijos, todo lo necesario para que puedan vivir cómodos y seguros. Pero siento que mi esposa nunca lo aprecia. ¿estoy haciendo algo equivocado?» Mario S.

Estimado Mario:
A veces, lo que más nos cuesta trabajo para entendernos en pareja es ponernos en el lugar del otro. Y no se trata solamente de entender a su esposa, cosa que está tratando de hacer, sino de darse cuenta y aceptar que, por diferencias de género, cada uno ve la vida desde una óptica distinta. Para ella, la seguridad y la atención llegan de manera emocional. Necesita sentir que está presente en su vida, no solo que la procura. Para la mujer, sentir es la clave. Por ejemplo, las palabras son muy importantes. Sé cuánto nos cuesta a los hombres darnos el tiempo de escuchar y comunicar lo que sentimos, pero ese tiempo para prestarle atención, halagarla y decirle cuánto la valora los acercará como nada material podrá lograrlo. Permítase ese encuentro. También será un regalo para usted.

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