Los incas se servían de cuerdas anudadas para registrar los acontecimientos importantes.
Los pueblos incas, que habitaban en el actual Perú desde el año 1000, se servían de cuerdas anudadas, a las que llamaban quipos, para registrar los acontecimientos importantes de cada región del Imperio Inca, y unían posteriormente todos los registros con el fin de obtener un censo actualizado. La excelente memoria de los quipucamayocs, o guardianes del quipo, les ayudaba a interpretar las cuerdas. Los nudos del extremo representaban las unidades; sobre estos se registraban las decenas, las centenas y así sucesivamente. Cada color representaba un producto: oro, maíz, ganado o lanzas.
También los pueblos indígenas de América del Norte se servían de los materiales disponibles para transmitir información. Los cinturones wampum, así llamados por las conchas de almeja pulidas con que se elaboraban, eran intercambiados por las tribus para sellar acuerdos, registrar acontecimientos o enviar mensajes. Estos cinturones, hechos con conchas ensartadas en hileras de cuerda, podían medir hasta 1,8 m. Los dibujos variaban de unas tribus a otras, si bien, por lo general, los blancos simbolizaban buenas noticias.