Los motivos con stencils o vinilos dan al hogar un verdadero toque personal. Otorgan vida a los muebles viejos y transforman una pared lisa.
Antes de comenzar
- Defina el diseño que quiere para decorar su espacio. ¡Es ideal para habitaciones de niños y adolescentes, más descontracturadas!
- Practique sobre papel
para perfeccionar la técnica. Trabajar desde los bordes hacia el centro ayuda a
evitar que la pintura se corra por debajo del esténcil y pierda definición. - Cuando retire el esténcil, limpie todo el exceso de pintura.
- Asegúrese de que
el esténcil esté limpio y seco antes de reutilizarlo.
Materiales
- Esténcil
- Cinta de enmascarar
- Pintura
- Cepillos para esténcil (con cerdas ajustadas y
rígidas) - Esponja sintética para una terminación suave o esponja natural para
una terminación más texturada.
El método del cepillo
Consiste en pinchar y puntear utilizando el cepillo.
- Limpie y prepare la superficie antes de utilizar el esténcil.
- Líjela con suavidad, de ser necesario, para quitar toda pintura vieja o suelta y alisar las imperfecciones.
- Sostenga el cepillo
de forma perpendicular a la superficie y comience a puntear –es decir, aplicar
color con golpecitos repetidos suaves–. - El color se obtiene gradualmente,
mezclando los tonos en lugar de cambiando abruptamente. - Use un cepillo
diferente para cada tono.
El método con esponja
Este método le da un buen
control sobre la textura de la pintura.
- Doble o corte la esponja para hacer
una almohadilla pequeña, mójela en la pintura y dele unos golpecitos sobre un
paño viejo o papel absorbente para retirar el exceso. - Aplique con golpecitos
directos o en forma de espiral.