Su bicicleta es una maquinaria que necesita ser
cuidada. Incluso si no la utiliza a menudo, debe realizar algunas tareas de
mantenimiento de forma regular.
Manténgase a salvo
Es crucial que todas las partes funcionales de su bicicleta estén en condiciones para minimizar las posibilidades de que fallen los frenos o derrapen las llantas. Afortunadamente, la mayor parte del mantenimiento es tan simple que puede enseñarles a los niños a cuidar sus propias bicicletas.
Ajustar la dirección
Si el manillar (o manubrio) está flojo, deberá ajustar el rodamiento de la parte superior. En la mayoría de las bicicletas modernas con un sistema de cabezal, esto se hace ajustando la tapa superior (a veces debajo de una cubierta antipolvo) con una llave Allen.
- Afloje los tornillos del vástago y ajuste la tapa superior hasta que quede bien; luego, reajuste los tornillos del vástago. En bicicletas más antiguas y en algunas bicicletas para niños, necesitará llaves para realizar los ajustes.
- Afloje un poco el rodamiento a contratuerca; luego, ajuste el tazón del rodamiento superior hasta que el manillar quede firme.
- Reajuste el rodamiento a contratuerca y manténgalo apretado con una llave; luego, utilizando una segunda llave, desenrosque el tazón hasta que ajuste contra el rodamiento a contratuerca.
Regular los frenos
- Las zapatas o pastillas de frenos deben posicionarse cerca de la llanta –pero no deben tocarla sin que se presione la palanca; de lo contrario, se desgastará y hará difícil el andar–. Se pueden hacer ajustes menores utilizando el regulador, ya sea al final del cable o en la palanca del mecanismo de freno.
- Para ajustar más el freno, utilice una llave Allen a fin de aflojar el tornillo de ajuste; tire del cable hasta que esté conforme con el ajuste y manténgalo mientras reajusta el tornillo.
