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Adiós, Hollywood

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Renée Zellweger cuenta por qué es raro decir que la actuación es un trabajo.

Nadie diría que a renée zellweger, que dejó un pequeño pueblo de Texas para distinguirse entre lo mejor de Hollywood, le falta el empuje y la determinación para ser una estrella. Pero Zellweger no quiere vivir la vida de las celebridades. En 2004 abandonó Los Ángeles y se mudó a la costa este de los Estados Unidos para huir de los fotógrafos. En Nueva York, donde no siempre la reconocen, puede vivir una vida más sencilla.

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Pero a la actriz de 39 años, ganadora de un Oscar, no le molestan las cámaras en un set de filmación, donde siempre acepta los desafíos: adoptó el acento de Carolina del Norte de la época de la Guerra Civil y fue aclamada por su interpretación de una vagabunda en Cold Mountain, de 2003; aprendió a bailar y cantar para su papel de Roxie Hart en Chicago, en 2002, y fue célebre por subir nueve kilos, con su 1,62 metro de estatura, para representar a la rellenita publicista con problemas románticos de El diario de Bridget Jones, de 2001.

Luego de estrenar la película Bee Movie, donde la actriz le da voz a Vanessa, una florista que se hace amiga de una abeja, y la comedia romántica Leatherheads, donde comparte pantalla con George Clooney, Zellweger se sentó con Selecciones para hablar sobre la soltería (su matrimonio de 2005 con el cantante de música country Kenny Chesney duró sólo cuatro meses), sobre los molestos paparazzi y su forma de humor favorita.

Selecciones: Con todo lo que has logrado, ¿sientes que Katy, en Texas, quedó muy, muy lejos?

Zellweger: Mmm, sí, supongo que sí. La persona que yo era en aquella época sigue aquí, pero he recorrido un largo camino desde entonces.

Selecciones: Siempre has dicho que no te gusta ir a Hollywood, pero, ¿cómo lo evitas, si eres actriz?

Zellweger: Es un trabajo completamente distinto, eso de ir a un lugar para que te saquen una foto. Todo tiene su momento, no lo dudo, y a veces puede ser divertido estar en un sitio tan inusual, pero no es lo que me motiva. No necesito estar en el ojo del huracán. Me encanta la actuación, de verdad, pero esa parte no me gusta. Es raro decir que es un trabajo.

Selecciones: ¿Te acostumbraste a la fama?

Zellweger: No. Me afecta cada día.

Selecciones: Vives en la ciudad de Nueva York, y también tienes una casa en Connecticut.

Zellweger: En realidad se suponía que viviría en Connecticut, pero estoy demasiado ocupada como para hacerlo mi hogar. Mi mejor amiga y sus hijos, que son como mi familia, viven ahí, así que ése es mi hogar.

Selecciones: ¿Por qué dejaste Los Ángeles y te viniste a la costa este?

Zellweger: No me gustaba ser seguida a todas partes por seis hombres con radios en seis camionetas.

Selecciones: Te refieres a los paparazzi, ¿verdad?

Zellweger: Sí, es toda una red. Comienzas a reconocerlos y piensas: Yo no invité a este tipo. Tengo que ir a una prueba de vestuario y después discutir un proyecto con un director; luego tengo una entrevista y voy a salir a correr. Y ellos no están invitados, pe-
ro de todas formas te acompañan todo el día. Así que decidí irme.

Selecciones: Ganaste un Oscar a la Mejor Actriz de Reparto por Cold Mountain. ¿Eso te ha ayudado asentirte más segura en este negocio?

Zellweger: Oh, no. Si algún día me ocurre, lo sabré. Aún siento como si se tratara de una grabación de video que no tiene nada que ver conmigo.

Selecciones: ¿Te permite el Oscar rechazar lo que no te interesa?

Zellweger: Yo rechazaba papeles antes de ganarme el derecho a hacerlo, porque sabía a qué me llevaría.

Selecciones: Así que te decías…

Zellweger: No quiero que la primera imagen de la película sea un close-up de mi pecho desnudo, porque eso conduce a algo que no tiene un lugar en mi vida. “Drew [imita la voz de un adolescente], papá, mamá, esta noche hay un estreno, ¿quieren venir?” Tengo que tener eso en mente. Sabía cómo no quería que fuera mi vida; eso es lo único que puedes controlar.

Selecciones: ¿Lamentas algunas de tus decisiones?

Zellweger: ¿De trabajo? No, porque nunca he hecho concesiones. ¿Hubo algo que no resultó exactamente como yo esperaba? Por supuesto, pero, ¿lamento haberle destinado tiempo? No. ¿Lamento las relaciones que se desarrollaron como resultado? No. Así que no me arrepiento de nada.

Selecciones: ¿Sientes lo mismo con tus decisiones personales? ¿No hay arrepentimientos?

Zellweger: Siempre hay un momento en que piensas: Oh, Dios mío. Pero a la larga, no, en absoluto. Un amigo escribió una vez: “Acepto mis errores, pues me llevan en la dirección correcta”. Y yo pienso: Entonces, no son realmente errores, ¿verdad? Son experiencias de aprendizaje. Y le agradezco a Dios por ellas, porque ¿quién quiere irse tan tonto como llegó?

Selecciones: Sabemos que te casaste con Kenny Chesney. Pero ya no estás casada. ¿Qué le dices a toda la gente que quiere saber qué pasó?

Zellweger: No les digo nada, porque no hay nada que agregar. Me casé y ya no estoy casada. No todo funciona como uno quiere y no soy la primera persona en el mundo que tiene decepciones en la vida.


La actriz se casó con el músico Kenny Chesney en la isla St. John en 2005; se separaron cuatro meses después.


Selecciones: Has dicho que aunque no sería tu ideal, no tendrías problemas con ser soltera toda tu vida.

Zellweger: No quiero sonar arrogante al decir que estoy contenta con mi situación, porque no soy una persona frívola y no me tomo a la ligera algo de tanta importancia, pero toda circunstancia tiene elementos positivos. Suena simplista, pero aún conservo las cosas buenas que siempre han estado en mi vida.

Selecciones: ¿Siempre has visto el vaso medio lleno?

Zellweger: No le veo sentido a la alternativa.

Selecciones: Has interpretado papeles serios y de comedia. ¿El humor es importante en tu vida personal?

Zellweger: Todos los días. Creo que lo gracioso nace de reconocer los elementos ridículos de una situación. Me encanta cuando un mal día es de verdad gracioso.

Selecciones: ¿Qué quieres decir?

Zellweger: Por ejemplo, la boda de mi amiga. Al principio, la preparación: el peinado se aplasta porque hay humedad. Después tiene que ir al banco y conseguir efectivo para los proveedores, y entonces, se lo roban…

Selecciones: Oh, no.

Zellweger: El DJ pone Who Let the Dogs Out para el primer baile de la pareja. Y el piso de la vieja y preciosa iglesia campestre se rompe. Te esfuerzas porque el día sea perfecto y nada resulta. Pero seguro que nadie lo olvidará jamás.

Selecciones: ¿Fuiste tú la que le hizo ver que ese día era gracioso?

Zellweger: Oh, no. Ella también se dio cuenta. Por algo es mi amiga.

Selecciones: Hace poco coprotagonizaste Bee Movie con Jerry Seinfeld.

Zellweger: Me divertí muchísimo trabajando con él. Me entusiasmaba ir al trabajo cada día. Cuando se le está ocurriendo algo, uno lo nota: Oh, está preparándolo. ¿Qué va a decir? Y entonces lo suelta, y es brillante.

Selecciones: Bee Movie es, obviamente, sobre abejas. Las abejas han estado muriendo misteriosamente. Pensaban que era por el calentamiento global, pero ahora creen que podría tratarse de un virus.

Zellweger: Lo del calentamiento global es muy extraño. Me asusta que esto afecte de alguna manera las leyes de la naturaleza, tal como las conocemos. Si los inviernos son más cortos, algunos animales se reproducirán mucho más: los roedores y los insectos, por ejemplo. La estación de mosquitos ya es el doble de larga.

Selecciones: Bee Movie es una película animada. ¿Es fácil hacer una voz?

Zellweger: Con la voz no tienes, como en las filmaciones tradicionales, otras cosas en las cuales apoyarte. Llegas en ropa deportiva y lo creas todo en tu mente.

Selecciones: ¿Lleva menos tiempo?

Zellweger: Oh, no, lleva años. Jerry comenzó hace cuatro años. Es un proceso que consume mucho tiempo. Sobre todo con Jerry. Todo el mundo se preguntaba: ¿Cuándo va a terminarse? Y yo decía: Cuando Jerry deje de despertarse a las cuatro de la mañana con nuevas ideas, es decir, nunca.

Selecciones: También está la película Leatherheads, dirigida por George
Clooney. ¿Ya lo conocías?

Zellweger: Oh, sí, desde hace diez años. Es un buen amigo.

Selecciones: Bueno, cuéntame un poco de Leatherheads.

Zellweger: Creo que el guión es muy bueno, y George lo mejoró aún más. Es un director excelente.

Selecciones: Ustedes dos deberían salir juntos.

Zellweger: Bueno, deja que tome mi teléfono y puedes llamarlo.

Selecciones: Sería perfecto.

Zellweger: ¿Sabes? Tenemos una relación excelente. Le escribo correos electrónicos de seis páginas sobre mi furia política, y él me contesta; compartimos muchas opiniones.

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