Cuando se encuentran dos personas, los saludos pueden variar desde un apreto?n de manos, a un beso o un abrazo. ¿Por qué nos saludamos de la manera en que lo hacemos?
El apreto?n de manos es uno de los gestos sociales ma?s antiguos y universales; es un si?mbolo de confianza que viene de una e?poca ma?s be?lica, ya que la mano que se ofrece para saludar es una mano desarmada. Nos damos la mano derecha porque es aquella con la cual un hombre podri?a empun?ar un arma. El sacudir la mano tambie?n podri?a hacer caer un arma oculta en la manga. Adema?s, se prefiere la mano derecha porque en la cultura a?rabe y otras, la mano izquierda se considera “impura” y no se usa para comer ni para saludar.
En el antiguo Egipto y en otras civilizaciones, darse la mano era un gesto ma?s formal; implicaba un contrato vinculante y todavi?a es asi?. En la Edad Media, el apreto?n de manos marcaba adema?s una promesa de lealtad. Para el siglo XIX, darle la mano a alguien era so?lo un gesto honorable y tambie?n un saludo cotidiano y universal.
Saludo con un apretón firme
La naturaleza del apreto?n de manos es importante para formarse una primera impresio?n. En el siglo XIX, el caricaturista brita?nico Thomas Tegg, en su tratado A Present for an Apprentice (Un regalo para un aprendiz) ensen?aba que uno debe “tomar la mano de un extran?o con ma?s reserva que si se trata de un conocido”, y nunca “recibir la mano del extran?o con frialdad o desconfianza”. No obstante, al dar la mano a un amigo muy conocido, “nunca sera? demasiado el afecto que se demuestre, siempre y cuando se trate de un sentimiento sincero”.
En el siglo XX, la asesora de etiqueta estadounidense Emily Post coincidio? con la cri?tica de Tegg hacia quienes sacuden la mano con demasiada energi?a, los que estrujan la mano de la otra persona o los que la sostienen sin fuerza, mientras la dejan escurrirse “como un pescado”. Ella estaba de acuerdo en que un hombre no debe tomar la mano de una dama hasta que e?sta la ofrezca. Un apreto?n firme se interpreta, au?n hoy, como muestra de sinceridad y fortaleza del cara?cter.
Al saludarse personas de diferente rango, el subordinado, si es varo?n, apoyara? so?lo una rodilla al hincarse. Una mujer se arrodillara?, como lo hari?a frente a Dios, sobre ambas rodillas. De esta idea de postrarse se deriva la reverencia, que adquirio? su forma ma?s solemne durante los siglos XVI y XVII en Francia. De una mujer se exigi?a que se inclinara por completo, con la rodilla derecha apoyada en tierra y la cabeza baja. En las cortes de la Europa medieval, se esperaba que todos, sin importer edad o rango, se inclinaran (o si era mujer, hiciera una reverencia) al entrar o salir de un salón si estaban presentes personas de rango superior.
La inclinación de cabeza, que en Japón, China y Corea suele acompañar el apretón de manos, comenzó como una actitud de postrarse frente a un superior y aún hoy sirve para dar énfasis a la diferencia de estatus. El saludo a un colega es una inclinación rápida y con ángulo leve; un saludo respetuoso a un cliente o a un superior requiere una inclinación más pronunciada. La inclinación más baja, usada como señal de una disculpa formal, indica vulnerabilidad, y más entre los samuráis y otros exponentes de las artes marciales.
Saludo con beso social
El beso es quizá la forma más primitiva de expresar un lazo afectivo íntimo entre personas, puesto que los bebés “besan” a sus madres cuando se amamantan. En la Biblia se menciona que Esaú saludó a su hermano Jacob con un beso. Los griegos y los romanos también se saludaban con un beso en la mejilla, y en artesanías de la India que datan del 1500 a.C. aparece el gesto de besarse.
El beso era un símbolo de honor. Las reglas de las cortes medievales de Europa exigían que el señor feudal besara en la mejilla a un caballero recién investido. En respuesta, éste debía besar la mano de su señor.
El saludo con un beso, que se da en la mejilla y suele acompañarse de un abrazo, es hoy una demostración de afecto y buena voluntad. A mediados del siglo XVII, los franceses saludaban a una dama con un beso en la mejilla, y los que visitaban Inglaterra comentaban cuán difundida estaba esa práctica de darse un beso.
El cronista Samuel Pepys relata que su amigo Sir George Cartanet lo “besó con efusividad”. Pero si bien se continuó con la costumbre en la parte continental de Europa, desapareció de Gran Bretaña en los siguientes siglos; el beso se reemplazó por el apretón de manos. La costumbre de besarse revivió con el espíritu más informal de fines del siglo XX y la influencia de la cultura de las celebridades.
Diferentes países, distintos gestos de saludo
El lenguaje de los gestos, se considere de buenos modales o no, evolucionó de manera diferente en distintas partes del mundo. Gestos que son perfectamente aceptables en un lugar serían el colmo de lo vulgar, incluso de lo obsceno, en otros. Hay una gran diferencia entre el signo de corte de mangas, con dos dedos y la palma hacia adentro, un gesto vulgar, y la V de la victoria, con la palma hacia afuera, que hizo famoso Churchill en la Segunda Guerra Mundial.
Manos en las caderas:
• Autoridad, seguridad en sí mismo – en la mayoría de los países.
• Distanciamiento malicioso u hostilidad – en el sur de Italia.
• Hostilidad – México y otros países de América del Sur.
Sentarse con las suelas o las plantas de los pies a la vista:
• Postura relajada – en Estados Unidos y Europa.
• Señal de falta de respeto – Egipto, Malasia y todas las naciones musulmanas.
Sentarse con las piernas cruzadas:
• Suele considerarse una falta de respeto fuera de Europa y América del Norte, en especial en Arabia Saudita, Ghana y Turquía
Golpecitos en la frente:
• “No lo recuerdo, tengo que prestar más atención” – Reino Unido.
• “Eres un tonto” – Alemania, Países Bajos, Rusia, República Checa y, en general, toda Europa.
• “Lo lamento” – India.
Formar un círculo con el índice y el pulgar:
• “Todo bien” – Estados Unidos.
• “Te mataré” – Túnez.
• Dinero – Japón.
Palmas hacia arriba y dedos separados:
• “Dámelo” – Estados Unidos, Reino Unido.
•“Eres un tonto” – Chile.
• Gesto obsceno – Grecia.
Pulgar hacia arriba:
• “Sí, hagámoslo” – Estados Unidos, Reino Unido, la mayor parte de Europa.
• Seña vulgar de desaprobación – en todo el mundo árabe, partes de Italia y de Grecia.
Puño cerrado en alto:
• Signo de victoria – Reino Unido, Europa.
• Gesto grosero o vulgar – Líbano, Pakistán.