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La peligrosa vida de la chinche acuática gigante

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Las corrientes de agua son el hábitat de este animal.

La peligrosa vida de la chinche acuática gigante.

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En el desierto de Arizona, en América del Norte, los arroyos presentan problemas especiales para los animales que viven en él. Durante la temporada lluviosa, las inundaciones pueden transformar un pequeño charco en un turbulento río, en cuestión de horas.

Estas corrientes de agua son el hábitat de la chinche acuática gigante, un animal que ha logrado adaptarse al peligroso lugar donde vive. Cuando los arroyos se secan, estos animales se alimentan de los insectos que quedan atrapados en los charcos; cuando han engordado lo suficiente, las chinches se reproducen. Una hembra pone unos 100 minúsculos huevos, que deposita en la espalda del macho.

Sin el cuidado del padre, los huevecillos no podrían sobrevivir, ya que el agua estancada de los charcos es pobre en oxígeno, y sin él los huevos morirían. Para evitarlo, el macho se sube a una roca situada justo por debajo de la superficie del agua, y constantemente flexiona y extiende sus patas traseras. Este movimiento mantiene un flujo constante de agua sobre los huevos y les brinda el oxígeno suficiente para mantenerse con vida.

Los padres pagan un alto precio por el cuidado que dan a sus hijos. La chinche acuática gigante es carnívora y depende de su velocidad, agilidad y mordedura venenosa para atrapar y dominar a su presa. Los huevecillos constituyen una carga estorbosa y mientras los lleve con él, el macho es incapaz de alimentarse adecuadamente (mientras las crías están naciendo, el macho deja de comer por completo). Además, para un macho cargado de huevecillos es difícil escapar de sus depredadores. El resultado es que al final de la temporada de reproducción siempre hay más hembras que machos.

La protección de los huevos es una tarea muy peligrosa, por lo que una chinche acuática macho debe estar totalmente segura de que no está cuidando los ajenos.

Él se cerciora de esto interrumpiendo a la hembra cada vez que pone un huevo, para poder aparearse de nuevo. Así, la chinche se asegura de él es el padre de todos los huevecillos por los cuales podría tener que dar su vida.

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