Enterate de los hábitos más riesgosos, de los pretextos más tontos y de las opciones para deshacerse de los kilos.
¿Recuerdás cuando tus padres te decían que te comiera todo lo que había en tu plato, porque había muchos chicos pobres en el mundo que no tenían qué comer? Pues recientemente alcanzamos un triste punto de inflexión: según un informe de octubre pasado de la Organización Mundial de la Salud (OMS), actualmente mueren más personas en el mundo debido al sobrepeso y la obesidad que a la desnutrición. De acuerdo con estadísticas de esa organización, hay aproximadamente mil millones de personas con sobrepeso en el mundo, y 350 millones de ellas con obesidad. A nivel global, cerca de 2,5 millones de muertes anuales se atribuyen a estas condiciones. Aún más inquietante es el hecho de que, a nivel mundial, se calcula que alrededor de 18 millones de niños menores de cinco años tienen sobrepeso.
Para entender mejor lo que sucede y acercarnos a una posible solución, Reader’s Digest encargó una encuesta global sobre alimentación. Entrevistó a cerca de 16.000 personas en 16 países para evaluar sus actitudes y comportamientos respecto al peso y la pérdida de este. Nuestro viaje estadístico revela el país en el que estar gordo no tiene gran importancia, y eugar en el que estar delgado es lo más popular. Deja en claro qué país culpa a los Estados Unidos por esta epidemia de obesidad, y cuál se culpa a sí mismo. Nuestras cifras muestran quién hace dieta, quién toma pastillas y quién le presta más (y menos) atención al médico. Y destaca las distintas y fascinantes maneras en que hombres y mujeres siguen difiriendo casi en todo.
Acompañanos a explorar cómo ven las personas la obesidad alrededor del mundo, y lo más importante: qué están haciendo al respecto.
El país más consciente de los peligros de la obesidad (que está haciendo algo al respecto): Finlandia
En la década del setenta, Finlandia tenía la mayor incidencia de muertes por enfermedades cardíacas en todo el mundo, y la obesidad era la causa principal. Pero ya no es así. Una campaña pública de salud para educar a la gente sobre la alimentación, el ejercicio y el peligro de fumar ayudó a reducir drásticamente las muertes por enfermedades cardíacas entre la población trabajadora en un 80 por ciento durante las tres décadas pasadas, y agregó un promedio de casi 10 años de vida a los finlandeses. Una de las claves para lograr este cambio, dice el doctor Pekka Puska, director general del Instituto Nacional para la Salud y la Asistencia Social en Helsinki, fueron los incentivos comunitarios, como los desafíos “Déjelo y gane”: las ciudades competían por premios basados en cuántas personas dejaban de fumar, reducían sus niveles de colesterol o perdían algunos centímetros en la cintura. Nuestra encuesta descubrió que el 83 por ciento de los finlandeses ha tratado de bajar de peso por lo menos una vez, una cifra 10 puntos porcentuales mayor que la de cualquier otro país entrevistado.
El país que siente mayor presión por ser delgado: Brasil
Es uno de los lugares del mundo que más atención presta a la apariencia física. En Río de Janeiro, donde las personas usan muy poca ropa en el carnaval o la playa, hay un auténtico culto al cuerpo. Nuestra encuesta descubrió que el 83 por ciento de los brasileños —tanto los hombres (el 77 por ciento) como las mujeres (el 89 por ciento)— cree que se pone demasiado énfasis en el peso. Quizás esto explica que algunos datos del país: el porcentaje de la población que toma pastillas para bajar de peso se duplicó entre 2001 y 2005, la cirugía plástica está en su apogeo, y los médicos incluso ofrecen liposucción en los dedos de los pies. En esta categoría, el segundo lugar lo ocupa la India (el 68 por ciento), y el tercero, los Estados Unidos.
El país en el que una mayor cantidad de mujeres quiere que sus esposos bajen de peso: Estados Unidos
Más de la mitad de las mujeres casadas de ese país desean que sus esposos sean más delgados. En contraste, el 47 por ciento de los hombres estadounidenses casados desea lo mismo de sus parejas. Irónicamente, el 68 por ciento de las mujeres dijo que su cultura pone demasiado énfasis en el peso.
El país donde una mayor cantidad de hombres quiere que sus esposas bajen de peso: India
El 48 por ciento de los hombres indios admite estar insatisfecho con la silueta de sus cónyuges, en tanto que el 46 por ciento de las mujeres opina lo mismo de ellos. El lado positivo es que al menos todos parecen estar igual de insatisfechos.
El país en el que lo aceptan a uno tal como es: Hungría.
Los húngaros son los que menos sienten que los demás desaprueban su peso (sólo un escaso 28 por ciento dijo que su país ponía demasiado énfasis en el peso), y los hombres casados tienden a estar más a gusto con la silueta de sus esposas que en cualquiera de los demás países. Sólo el 11 por ciento de los hombres húngaros y el 14 por ciento de las mujeres dicen que sus parejas necesitan dejar de comer.
El país que toma más pastillas para adelgazar: China
El 37 por ciento de los chinos admite tomar pastillas para bajar de peso. Los expertos dicen que la conciencia corporal está creciendo en toda China, y que las pastillas para bajar de peso se ven como una forma rápida de alcanzar el ideal. Sin embargo, estas pastillas pueden ser mortales, pues su fabricación no está regulada. En la encuesta, las mujeres de casi todos los países fueron más propensas que los hombres a ingerirlas. (En China, las toman el 48 por ciento de las mujeres y el 18 por ciento de los hombres). Otros países que recurren a las pastillas son Brasil (el 30 por ciento de la población), Rusia (el 24 por ciento) y México (el 23 por ciento).
El país en el que las personas suelen ignorar más al médico: Suiza
Cuando les preguntamos a las personas alrededor del mundo las razones por las cuales habían tratado de bajar de peso, las recomendaciones del médico no ocupaban el primer lugar de la lista. Pero los suizos son quienes menos caso hacen a los médicos (sólo un 11 por ciento las citó como motivación). Los mexicanos (el 46 por ciento) y los franceses (el 39 por ciento) les prestan más atención.
El país en el que aún tratan de perder kilos: Rusia
Fumar para suprimir el apetito se considera un método tonto en todo el mundo, pero persiste en algunos países: México, China, Filipinas y Rusia. El 23 por ciento de los hombres rusos y el 18 por ciento de las mujeres admiten fumar cigarrillos para bajar de peso.
El país donde las personas suelen culparse más por estar gordas: Filipinas
Hay que elogiar su honestidad: el 95 por ciento de los filipinos dice disfrutar de la buena comida, y el 82 por ciento admite no tener la fuerza de voluntad para resistirla. Es más, sólo el 83 por ciento ha tratado de bajar de peso.
El país que más culpa a los estadounidenses: Francia
¿Debería sorprendernos? Probablemente no. Más que cualquier otro de los países entrevistados, Francia señala los hábitos alimentarios estadounidenses y su comida rápida como los culpables del aumento en la circunferencia de sus habitantes. En comparación, es tranquilizador saber que los estadounidenses reconocen y admiten la responsabilidad de lo que han hecho: casi tres cuartas partes de ellos dicen que la comida rápida —un tipo de cocina que han exportado— promueve la obesidad.
El país con el enfoque más saludable para perder peso: México
Casi todos los mexicanos —el 93 por ciento— han intentado cambiar por una comida más saludable en un intento por reducir el tamaño de su abdomen. El 86 por ciento de ellos también ha tratado de tener mayor actividad física, y el 55 por ciento aún recurre a privarse de los alimentos. Más que cualquier otro de los países entrevistados, México sabe lo que debe hacer, aunque sus habitantes no siempre ponen en práctica ese conocimiento (el 70 por ciento de los mexicanos tiene sobrepeso u obesidad, de acuerdo con el Instituto Nacional de Salud Pública).
El país donde los kilos de más afectan los ascensos laborales: India
El 67 por ciento de los indios dice que tener sobrepeso puede “interferir gravemente” con su avance en el plano profesional. Eso es al menos diez puntos mayor que en cualquiera de los demás países entrevistados. De hecho, el 41 por ciento de las personas que hacen dieta en la India dice que su estímulo es el deseo de conseguir un ascenso. Y este es uno de los pocos ejemplos en que los hombres (el 52 por ciento) sienten mayor presión por bajar de peso que las mujeres (el 31 por ciento). La noción de que el exceso de kilos puede acorralarlo en un callejón sin salida en la oficina también predomina en Alemania y Filipinas.
El país donde luchan más las mujeres con sobrepeso: Estados Unidos
En todos, menos dos de los países entrevistados (China e India), la gente concuerda de manera abrumadora en que es más difícil ser mujer que hombre con sobrepeso. Pero este sentimiento es más fuerte en los Estados Unidos. Casi la mitad de sus habitantes (el 58 por ciento de las mujeres y el 37 por ciento de los hombres) expresó esta opinión.
Los países donde ser gordo interfiere más con la vida sexual: empate entre Australia y México.
La mayoría (el 52 por ciento) de las personas en estos países dice que estar gordo “interfiere gravemente” con pasar un buen rato en la cama. Curiosamente, los húngaros (el 15 por ciento) y los holandeses (el 18 por ciento) son quienes menos opinaron que el tamaño hace alguna diferencia. Por cierto, en todos los países los hombres se inclinaron más que las mujeres por pensar de este modo.