Lucir una piel brillante y suave en invierno ya no es imposible. ¡Aquí todos los secretos!
El frío invierno es una de las peores amenazas para la piel ya que provoca resecamiento e irritación, dando como resultado un efecto agrietado y de tirantez. Las mujeres con pieles secas deben preocuparse especialmente por mantenerla hidratada durante esta época.
A diferencia de la piel saludable, que se recupera por sí sola, la piel severamente seca se agrieta y se vuelve escamosa generando comezón. Estos síntomas alertan que la humectación de la piel no es suficiente y que esta ha perdido sus propiedades.
Las cremas dermatológicamente probadas son ideales para el cuidado de la piel seca, generando resultados de triple acción: mejora inmediata de la resequedad, protección de larga duración y recuperación continua para que la piel luzca brillante y suave sin sensación grasosa.
Consejos para cuidar la piel en invierno
– Protegerse de las bajas temperaturas y vientos fuertes: lo que más afecta la piel en el invierno es el frío. Para evitar el impacto se deben tapar las áreas más susceptibles como el rostro y las manos.
– Moverse: a pesar de que en invierno hacer ejercicio cueste un poco más, es un gran beneficio para la piel seca.
– Mantener la temperatura adecuada: los cambios bruscos de temperatura no son buenos para la piel. Se debe mantener el ambiente a una temperatura regulada, ya que un exceso de calefacción también reseca la piel y puede generar mucosa (la primera barrera de protección contra las infecciones).
