Un período prolongado de clima caluroso puede ser algo más que simplemente molesto.
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La deshidratación y el golpe de calor pueden afectar a cualquier persona y el índice de mortalidad (especialmente entre la gente mayor) puede ascender estrepitosamente, por lo que es recomendable saber cómo proceder para permanecer saludable.
Precauciones
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Abastézcase de agua embotellada, jugo de fruta y otras bebidas frías antes de que el clima se vuelva caluroso.
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Tenga un plan en caso de que se corte la electricidad, lo cual es muy común cuando hace calor y las redes eléctricas se sobrecargan. Guarde una linterna y velas en un lugar accesible y llene el congelador de provisiones: los alimentos se mantienen fríos por más tiempo cuando hay un corte de electricidad si el congelador o el refrigerador están llenos.
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Procure tener hielo y helado para los niños. Esto también puede ayudar a llenar el congelador.
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De ser posible, compre ventiladores o aires acondicionados para refrescarse.
¿Qué hacer?
Refresque su casa
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Use persianas y cortinas que bloqueen el sol. Cierre y cubra todas las ventanas que reciban luz solar directa. Utilice toldos, postigos, sombrillas de jardín o gazebos para bloquear el sol.
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Ventile los ambientes. Mientras la temperatura del aire del exterior sea más baja que la del interior de su casa, abra las ventanas que estén en la sombra. Abra las puertas y las ventanas temprano y tarde, pero ciérrelas durante las horas más calurosas del día.
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Apague las luces. Evite el uso innecesario de aparatos y lámparas eléctricas, especialmente si son halógenos. Las bombillas de bajo consumo y las luces fluorescentes son las más frías.
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Cocine los alimentos en microondas. Si desea preparar un plato caliente, utilice un microondas ya que genera menos calor que un horno o una hornalla.
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Enfríe el aire. Los ventiladores le ayudarán a refrescarse ya que hacen circular el aire y mejoran la capacidad de transpiración del cuerpo. Para refrescar más el aire, coloque un ventilador detrás de un recipiente poco profundo lleno con agua y hielo.
Refrésquese
- Vístase adecuadamente. Use ropa liviana y suelta de fibras naturales o materiales sintéticos deportivos diseñados para eliminar la transpiración.
- Opte por bebidas frías. Un poco de agua o jugo de fruta frío rehidrata y refresca el cuerpo. El té o el café pueden calmar la sed, pero aumentan la temperatura del cuerpo. Evite beber alcohol ya que aumenta la deshidratación.
- Ingiera alimentos fríos. Coma alimentos livianos, bajos en proteínas y crudos como las ensaladas. Pueden satisfacer sus necesidades energéticas sin elevar su índice metabólico; también tienen alto contenido de agua.
- Dúchese o tome un baño. Tome una ducha o baño con agua fresca. Envolverse la cabeza o los hombros con una toalla húmeda también puede ser muy refrescante.
- Descanse de día. Realice las actividades muy exigentes, como las tareas de la casa, bien temprano a la mañana o de noche. Intente hacer el menor esfuerzo físico posible durante la franja horaria del día en la que la temperatura es más elevada (11 a 15 hrs).
¿Quién es vulnerable?
Las personas mayores y los más pequeños son más susceptibles a las afecciones relacionadas con el calor, como deshidratación, agotamiento por calor y golpe de calor. Preste atención particularmente a:
- Necesidades de salud especiales. Si una persona que sufre una enfermedad cardíaca o respiratoria empeora cuando hace calor, consulte a un médico.
- Refrescarse. Si no puede refrescar una casa adecuadamente, averigüe si hay algún centro comunitario o biblioteca con aire acondicionado en su localidad que la persona pueda visitar.
