A propósito del Día de los enamorados, elegimos las 4 historias de amor más sorprendentes del mundo.
1. Napoleón y Josefina
Primer encuentro. Según cuenta en sus memorias Hortensia, hija de Josefina, se conocieron cuando Josefina visitó a Napoleón para agradecerle por permitir a su hijo conservar una espada familiar a pesar de que estaba prohibido a los ciudadanos tener armas. Napoleón, que miraba unos mapas cuando ella entró a la sala, se enamoró inmediatamente al verla.
Su secreto mejor guardado. Justo después de su boda, Napoleón se embarcó en diferentes campañas militares. En su ausencia, Josefina tuvo varias aventuras.
El fin. Napoleón se convirtió en emperador en 1804, pero como Josefina no pudo darle el heredero que él quería, se divorció de ella en 1809. Cuando Napoleón fue exiliado a Elba, Josefina le escribió para volver a vivir con él, pero falleció el 29 de mayo de 1815. Tiempo después de escapar de la isla, Napoleón recogió unas violetas del jardín de su amada y las llevó consigo dentro de un relicario hasta el día de su muerte.
2. Diego Rivera y Frida Kahlo
Primer encuentro. Kahlo admiraba el arte de Rivera y le pidió consejos sobre sus propios trabajos. Se conocieron en una fiesta, pero no tuvieron oportunidad de hablar. Sin embargo, Kahlo recuerda que en un momento de la velada, Rivera disparó con una pistola a un fonógrafo y ella pudo sentir como se desataba en su interior un profundo interés en él.
Su secreto mejor guardado. Durante su tempestuosa relación, Rivera tuvo una aventura con Cristina, hermana menor de Kahlo. Kahlo tampoco era precisamente inocente. Tuvo varias aventuras, a veces con mujeres, como Josephine Baker y Isamu Noguchi. Kahlo también estuvo sentimentalmente vinculada con el comunista León Trotsky durante su exilio.
El fin. La pareja se divorció en noviembre de 1939, pero volvieron a contraer matrimonio en diciembre de 1940. Para mantener la paz en el hogar, vivían en casas contiguas.
3. Antonio y Cleopatra
Primer encuentro. Para reforzar su precaria posición política, Antonio invitó a Cleopatra a Tarso (territorio hoy conocido como Turquía) con la intención de generar una alianza. Durante este encuentro en el año 41 a.C., Cleopatra cautivó instantáneamente el corazón de Antonio.
Su secreto mejor guardado. Cuando Antonio se enamoró de Cleopatra, él ya estaba casado con Octavia la Menor, hermana de Octavio, quien le declaró la guerra a la pareja debido al insulto que esto significó para su familia.
El fin. Engañado por un dato falso sobre el suicidio de Cleopatra, Antonio decidió quitarse la vida con su propia espada. Sin embargo, Cleopatra solo estaba escondida y pudo ver a Antonio, quien finalmente murió en sus brazos. Si bien la leyenda cuenta que Cleopatra terminó con su vida dejándose morder por una serpiente, es más probable que haya utilizado un brebaje de cicuta para suicidarse luego de ver morir a Antonio.
4. Príncipe Eduardo y Wallis Simpson
Primer encuentro. El Príncipe Eduardo de Inglaterra conoció a Wallis Simpson durante una fiesta en 1931, pero esta no fue una historia de amor a primera vista. Sin embargo, siguieron encontrándose en otros eventos sociales.
Su secreto mejor guardado. Al comenzar su relación, Simpson aún estaba casada con Ernest Simpson. Y Eduardo estaba involucrado con Lady Furness, anfitriona de la fiesta en la que se conocieron.
El fin. Debido a que su relación escandalizó a la corona británica, Eduardo abdicó su derecho al trono. El 10 de diciembre de 1936, durante una transmisión de radio, Eduardo anunció su abdicación y dijo que: “Le resultaba imposible llevar adelante la pesada tarea” de ser rey sin tener a su lado a “la mujer que amaba”. Contrajeron matrimonio y vivieron la mayor parte de sus vidas en Francia.
