Existen teorías sobre algunos métodos para la salud que terminamos por creer. Acá desmitificamos algunos.
1. Las bajas temperaturas provocan enfermedades respiratorias
¡MITO! Los gérmenes son los únicos culpables. Aun cuando salga al frío helado con el cabello húmedo, si no hay patógenos, no se resfriará. Sin embargo, existe una correlación: los virus que causan el resfrío común prefieren los ambientes fríos.
2. Los antitranspirantes son cancerígenos
¡MITO! Estas sustancias retienen el sudor en el cuerpo temporalmente. Por eso algunos expertos creían que el líquido acumulado en los conductos sudoríparos propiciaba la formación de tumores. No obstante, aún no ha sido posible confirmar tal teoría: de acuerdo con los resultados de la mayor investigación al respecto efectuada hasta la fecha, no existe ningún nexo entre el cáncer y el uso de antitranspirantes o desodorantes.
3. Si tiene hemorragia nasal, incline la cabeza hacia atrás
¡MITO! Esto eleva la posibilidad de tragar sangre, lo cual podría irritar el estómago y provocar vómitos. En vez de eso, inclínela ligeramente hacia adelante y oprima las aletas nasales durante diez minutos.
4. Lo ideal es hacer varias comidas pequeñas en el día, no dos abundantes
¡MITO! Si bien quienes comen como pajaritos no tendrán problema con este régimen, otros se quedarán con hambre y el plan les jugará en contra. Lo importante es prestar atención a la cantidad de nutrientes y calorías que consume; la distribución de su ingesta no es tan importante.
5. Despertar a un sonámbulo puede causarle un infarto
¡MITO! Si logra despabilarlo, estará desorientado o angustiado; sin embargo, es muy poco probable que le dé un infarto o entre en coma. Lo mejor que puede hacer es acompañar a la persona a la cama o despertarla con sutileza para no asustarla.
6. Las zanahorias mejoran la vista
¡MITO! Las zanahorias deben su fama de potenciadoras visuales a la sustancia química que les proporciona su característico color: el betacaroteno. Este compuesto se transforma en vitamina A, que mejora el desempeño de los ojos en la oscuridad. No obstante, el proceso de conversión no es eficiente y el cuerpo lo suspende una vez que ingiere cierta cantidad del nutriente. Para mejorar la vista, consuma verduras ricas en vitamina A, como las hortalizas (por ejemplo, el coliflor o la espinaca).
7. El café deshidrata
¡MITO! La idea de que la cafeína es un diurético que produce escasez de líquido en el organismo no tiene sustento. De hecho, las investigaciones señalan que la producción de orina de quienes beben café o té es similar a la de quienes toman agua. Este cuenta como líquido y contribuye a mantenerlo hidratado.
8. Inmunizarse contra la influenza podría hacer que se enferme
¡MITO! Es verdad que las vacunas contienen virus debilitados que detonan una respuesta inmunitaria. Y aunque es posible experimentar efectos secundarios leves después
de la inyección (jaquecas y febrícula, por ejemplo), si su sistema inmunitario se encuentra bien, será muy poco probable que le dé influenza.
9. A los afrodescendientes no les da cáncer de piel
¡MITO! Aunque la piel de color es menos propensa a sufrir quemaduras, no es posible afirmar que sea inmune a los nocivos rayos UV ni a sus consecuencias. Si sabe que se va a exponer al sol, siempre utilice un buen protector.
10. Si no tiene una lesión en forma de diana, no se contrajo la enfermedad de Lyme
¡MITO! Entre el 20 y el 30 por ciento de los pacientes que sufren este padecimiento no llega a desarrollar el eritema migratorio. Otros síntomas frecuentes son fiebre, jaqueca, dolor muscular e inflamación de los ganglios linfáticos y las articulaciones.
