Una lluvia fuerte y un viento intenso, especialmente combinados, pueden generar condiciones de conducción peligrosas; las inundaciones aumentan significativamente el riesgo.
No viaje con un clima adverso a menos que sea esencial. Si tiene que viajar, vaya equipado para el peor de los casos y adapte sus técnicas de conducción a las condiciones climáticas.
Encienda el limpiaparabrisas al máximo
Encienda el limpiaparabrisas a la velocidad más rápida. Baje las luces para disminuir el resplandor y encienda el desempañador para eliminar la condensación.
Regrese si es necesario
Deténgase si no está seguro y regrese por caminos conocidos si el clima empeora. Salir de un camino principal y tomar uno secundario para escapar de una tormenta puede ser riesgoso debido a que los caminos secundarios son más propensos a las inundaciones.
Diríjase a un lugar protegido
Si el clima empeora, la única opción es buscar un lugar seguro. La estación de servicio o los estacionamientos son ideales para protegerse, si puede llegar hasta alguno. En condiciones climáticas muy peligrosas, debe dejar el automóvil y buscar protección en algún edificio cercano.
Encienda el limpiaparabrisas
La prueba más fácil para saber si puede continuar el viaje es encender el limpiaparabrisas. Si no puede quitar la nieve acumulada en el vidrio, no tiene más opción que buscar un lugar para protegerse.
Prepárese para regresar
A la primera señal de que no puede continuar, vuelva y busque un lugar seguro. Si vuelve puede sobrepasar la tormenta. Busque un lugar donde pueda protegerse, como una estación o un restaurante.
Actúe.
No continúe pensando que encontrará un lugar más adelante. Las tormentas de nieve pueden obstruir las calles en sólo unos minutos. Si tiene que protegerse dentro del vehículo al costado de la calle, no salga porque podría quedar varado.
Conduzca con firmeza
Mantenga ambas manos en el volante en todo momento, especialmente en tramos expuestos o puentes, o cuando sobrepasa otro vehículo.
Mantenga distancia
Otros vehículos pueden ser impulsados por el viento fuera del camino. Mantenga una distancia de por lo menos dos segundos con otros vehículos y tenga especial cuidado con las casas rodantes, las bicicletas, las motos y los caballos.
Prepárese para ráfagas repentinas
Pueden ocurrir ráfagas repentinas en los tramos expuestos del camino, al sobrepasar vehículos o espacios de cercos, o al sobrepasar vehículos anchos. Si se ve atrapado en una ráfaga, sostenga el volante con fuerza para mantener el control. El viento puede mover un vehículo, pero rara vez tiene la fuerza para volcarlo fuera de la ruta.