No es necesario un diseñador de interiores para dar un nuevo aire a tu casa, ni tampoco se trata de gastar mucho dinero en muebles y accesorios nuevos.
Realmente podés transformar el aspecto de tu hogar con estas siete ideas decorativas súper fáciles y rápidas:
Nuevo uso para las persianas
Sujetá con bisagras tres o más persianas de manera que se plieguen en forma de acordeón. Así dispuestas, pueden funcionar muy bien como un atractivo panel separador de áreas de dormitorio y vestidor, o se pueden usar para dar sombra a porches o patios. También podés transformarlas en un exclusivo respaldo para la cama.
Canasto contenedor
¿Qué podemos hacer con todos esos almohadones decorativos que están siempre por delante? Convertí un viejo canasto de mimbre para ropa sucia en un contenedor de almohadones. Si tenés un canasto de plástico, colocalo sobre una sábana y doblá el lateral y las esquinas hacia adentro de manera tal de cubrirlo, como si estuvieras envolviendo un regalo. Luego llená el canasto con los almohadones y nadie se dará cuenta de que no lo compraste en un moderno negocio de artículos de decoración.
Agregar un punto focal a un ambiente
Disponer un elemento visual que llame la atención ayuda a unificar la decoración de tu casa. Sin un punto focal, el ambiente puede parecer insulso o desorganizado. Probablemente puedas usar algún artículo que ya tengas para crear este efecto. Por ejemplo, podés enmarcar ese hermoso pañuelo de seda o ese estupendo chal de encaje y colgarlo en un lugar central de la habitación. También podés pintar la pared de fondo de la chimenea para que resalte más la estructura.
Color en molduras y marcos
Antes de comenzar un proyecto de redecoración a gran escala, revisá las molduras de las paredes y marcos, y buscá restos de pintura que tengas en casa. Se puede usar un único color en los marcos y molduras de todos los ambientes de la casa para unificar espacios. Pero también podés incorporar color, por ejemplo, en la habitación de los chicos, la sala de estar o el cuarto de juegos, y pintar los marcos y molduras de un color intenso.
Sillas extra
Convertí esas sillas extra que no usás en algo más útil. Las sillas con respaldo recto y sin apoyabrazos, con asientos rígidos y planos son ideales para este proyecto. Pintá dos sillas de diferentes diseños del mismo color para crear un atractivo par de “mesas” de luz. También podés restaurar o pintar una silla para el vestidor y allí colgar sombreros, carteras y paraguas.
Alacenas antiguas
Cuando cambies una alacena vieja como parte de un proyecto de renovación de tu cocina, no te deshagas de ella. En lugar de tirarla, reusala. Por ejemplo, podés colgarla en el garaje o en el sótano y usar ese espacio para guardar cosas. También podés colocar rueditas en la parte de abajo y transformarla en un carro rodante para el lavadero. Y dos alacenas dispuestas una encima de la otra pueden convertirse en un excelente espacio para guardar artesanías y manualidades.
Espléndido centro de mesa
¡Olvidate de comprar flores costosas! En cambio, prepará una selección de copas, botellas de vidrio, floreros y jarrones decorativos. Acomodá estos artículos de vidrio sobre la mesa del comedor y agregá unas velas blancas comunes dentro de algunos de los recipientes. Una selección de elementos de vidrio y cristal transparentes creará un clima invernal; una combinación de cristales transparentes y de color dará un efecto más brillante y colorido.
