¡Ahora vas a poder disfrutar de comer ajo sin pensar en el mal aliento!
El ajo ayuda a reducir la presión arterial y el colesterol, pero el mal aliento que produce puede durar hasta 72 horas. “El ajo contiene compuestos de azufre que se desprenden no solo en la boca, sino en el intestino, desde donde se filtran a los pulmones y la piel”, explica el doctor Victor Sierpina, profesor de medicina familiar e integral de la Facultad de Medicina de la Universidad de Texas en Galveston. Esto hace que la simple higiene bucal no baste para quitarse el aliento a ajo.
La solución está en combinar estas medidas:
1. Use hierbas de olor. Conviene sazonar los platos con hierbas, algunos de cuyos componentes, como la clorofila y los polifenoles, se unen a los compuestos de azufre del ajo y contrarrestan el olor. Entre las más eficaces están el perejil, el cilantro, la albahaca, el tomillo, la menta y el eneldo.
2. Tome leche. La leche tomada antes de la comida o con ella reduce el olor a ajo, según un estudio publicado en 2010 en el Journal of Food Science. “El agua [de la leche] actúa como un enjuague bucal, y la grasa neutraliza el azufre”, señala la doctora Kantha Shelke, vocera del Institute of Food Technologists. Prefiera la leche entera a la descremada.
3. Beba té verde. Si no le gusta la leche con un plato sofrito, sustitúyala por té verde, que es rico en polifenoles.
4. Haga la salsa de tomate con champiñones. Según estudios preliminares, los polifenoles de estas setas son más rápidos que cualquier otra sustancia para quitar el aliento a ajo, agrega Shelke.
5. Coma fruta de postre. Las enzimas de manzanas, ananás y kiwis descomponen los compuestos de azufre.
