Conocé por qué ladra tu perro. Aprendé de estos consejos que te ayudarán a domesticarlo.
Ladrar forma parte del sistema de comunicación del perro, por lo que es una conducta normal de la especie. Los ladridos varían según las razas, pero generalmente los perros de menor tamaño suelen ladrar más.
La función que cumple el ladrido es diversa y si prestamos atención vamos a identificar distintos tipos en el mismo animal: hay vocalizaciones que cumplen la función de alarma, como cuando detecta una supuesta amenaza (miedo); el ladrido será distinto cuando quiera rechazar a un intruso que se aproxima a su territorio (defensa). El ladrido será también diferente si el perro intenta “llamar” a un compañero de jauría para jugar (social) o para amenazar a un competidor (dominante).
Aunque a veces, el ladrido se puede transformar en un ritual molesto para los demás integrantes de la familia o incluso para los vecinos.
Si su perro ladra en forma excesiva, lo primero que se debe hacer es identificar el tipo de ladrido. Para eso necesitamos saber en qué situación se presenta, si hay estímulos desencadenantes y cuál es la intensidad, frecuencia y duración de las vocalizaciones, si lo hace en presencia o ausencia del propietario. A partir de estos datos debemos evitar o controlar, de ser posible, los estímulos que lo provocan.
Otra de las opciones es enseñarle a obedecer órdenes simples para neutralizar el ladrido o bien distraerlo desde lejos e involucrarlo en otra actividad.