Si las ventanas se ensucian luego de limpiarlas, siga estos consejos.
Si las ventanas se manchan después de limpiarlas, ponga en práctica este truco que aplican los expertos. Use una escobilla para limpiar ventanas con borde de goma suave y blando (o papel de diario abollado, evite las secciones de color). Seque una franja de 2,5 cm en la parte superior o lateral de cada ventana y siempre comience el procedimiento desde ese punto. Iniciar el secado sobre vidrio seco es una de las claves para evitar la formación de manchas. No lave las ventanas cuando la luz del sol dé en forma directa sobre la superficie, porque el vidrio que se seca demasiado rápido es más proclive a la formación de manchas. Los días nublados son ideales para limpieza de ventanas.
Si hay moho en los marcos, limpie el área con una solución de lavandina y detergente. Las manchas negras o grises de moho sobre los marcos de madera pueden limpiarse con una solución de 60 ml de lavandina de uso doméstico y 30 ml de detergente para lavar la ropa diluidos, en un litro de agua. Siempre con guantes de goma para proteger sus manos, pase la solución sobre las manchas con ayuda de una esponja, deje reposar por diez minutos y luego enjuague abundantemente con agua limpia.
Si no puede mantener limpios los marcos externos de las ventanas, aplique una capa de cera para pisos y así estarán protegidos por más tiempo.
Si las persianas siempre están llenas de tierra, use un aerosol antiestática. La mejor manera de evitar que se junte polvo rápidamente es aplicar el producto sobre las persianas justo después de limpiarlas.
Si las ventanas se ensucian extremadamente rápido, cambie el filtro del sistema de calefacción y refrigeración. Los filtros deben cambiarse todos los meses o cada dos meses, o sencillamente cuando, al colocarlos, contra una luz no pueda ver a través del filtro.