9 consejos para que te relajes y disfrutes de esta época del año.
1. Comé con inteligencia
Las personas agobiadas por el estrés comen en busca de alivio porque es la necesidad psicológica de tratar de equilibrar la frustración que uno siente con algo que le resulta positivo. “No se trata de hambre. Uno necesita sentir que se está consintiendo”, dice el psicólogo alimentario Brian Wansink, autor del libro Esbelto por diseño: Soluciones para no comer mecánicamente en la vida diaria.
Quienes tienen antojo de tentempiés y comen la cuarta parte de la cantidad habitual, para luego distraerse en algo, pasados 15 minutos se sienten igual de satisfechas e incluso más felices que las que comen la porción completa. “Su estómago no recuerda cuánto comió. Solo sabe que quería chocolate, y que eso le dio”.
2. Más optimistas
Afrontar con optimismo una situación estresante puede ayudar a superarla más fácilmente. “Si tiene que cumplir con una tarea en un plazo, en vez de preguntarse ‘¿Cómo voy a hacerlo?’, diga: ‘Esto es todo un desafío’”, dice Sonja Lyubomirsky, de la Universidad de California en Riverside, autora de libros e investigadora de la felicidad.
Si te cuesta trabajo cambiar de punto de vista, preguntate si eso te importará dentro de un año. A mayor perspectiva, menos estrés.
3. Dormí bien
Permanecer despierto te hace más vulnerable al estrés. “El valor restaurativo de dormir bien no puede reemplazarse”, dice el doctor Joseph M. Ojile, miembro del consejo de la Fundación del Sueño de Estados Unidos y fundador del Instituto Clayton del Sueño, en Saint Louis, Missouri.
Si tus compañeros de trabajo comentan: ‘No dormí nada anoche’, y notás que se ponen irritables, se trata de una respuesta normal a sus niveles altos de estrés”.
4. Adueñate de la situación estresante
El estrés ayuda a los animales salvajes a superar situaciones que están fuera de su control, como un depredador que los persigue. Su presión arterial se dispara y experimentan una descarga de adrenalina que los ayuda a huir rápidamente. Cuando las personas sufren estrés, rara vez necesitan escapar de algo pero su organismo tiene las mismas reacciones. Con el tiempo, los aumentos repentinos de la presión arterial y las descargas de adrenalina pueden producir hipertensión, diabetes, ansiedad y depresión, dice Robert Sapolsky, profesor de neurología en la Universidad Stanford y autor del libro Por qué las cebras no padecen úlceras.
Tomar el control de un aspecto de la situación estresante puede ayudar a que parezca menos agobiante.
5. Reducí el consumo de cafeína
No recurras al café para aguantar la vorágine de las Fiestas. La cafeína aumenta los niveles de hormonas del estrés, como el cortisol y la adrenalina, señala el doctor Andrew Weil, fundador del Centro de Medicina Integral de la Universidad de Arizona. En vez de café, él recomienda beber té verde, que contiene mucho menos cafeína y contiene unos compuestos antioxidantes llamados catequinas, así como el aminoácido L-teanina, el cual parece promover la relajación y la alegría.
6. Alejate de los dramas familiares
En las reuniones familiares es común que la gente regrese al pasado y se comporte de maneras que provocan incomodidad y estrés, incluso a las personas más seguras y felices. “Esos viejos sentimientos se despiertan al estar en la misma casa, con las mismas personas y frente a la misma comida”, explica la psicóloga Pauline Wallin.
Si las cosas se ponen tensas, andá a la cocina para ayudar a calmarte, o respirá hondo en el baño.
7. Enfocate en el lado divertido de las cosas
A nadie le gustan las largas colas en los centros comerciales ni las peleas familiares, pero si sos capaz de tomar eso con sentido del humor vas a poder mejorar tu estado de ánimo e incluso reducir tu presión arterial. “Las cosas de las que nos quejamos son las mismas de las que hacemos chistes; el tráfico, por ejemplo, o un mal servicio en un restaurante”, dice Peter McGraw, director del Laboratorio de Investigación del Humor de la Universidad de Colorado, en Boulder. “Nuestros estudios indican que a las personas les gustan los quejumbrosos con sentido del humor. El hecho de reírse de una cosa desagradable ayuda a convertirla en algo menos estresante”.
8. Comé alimentos de bajo índice glucémico
Algunos carbohidratos, sobre todo la harina de trigo refinada, tienen un índice glucémico alto, lo que implica que pueden provocar ascensos y descensos bruscos en la glucosa sanguínea. Esos cambios abruptos liberan hormonas del estrés y hacen que uno se sienta cansado, irritable y hambriento. Una dieta con bajo índice glucémico mantiene más estable la glucosa sanguínea y, como resultado, ocurren menos altibajos repentinos, cambios de humor y antojos.
9. Caminá para alejar las preocupaciones
Si el estrés del trabajo te agobia a lo largo de toda la jornada, dedicá tiempo para hacer ejercicio antes de regresar a casa. “La actividad física puede usarse como un tranquilizante para controlar la depresión y la ansiedad”, asegura el doctor Kenneth H. Cooper, fundador del Centro Cooper de Ejercicio Aeróbico, en Dallas, Texas, y autor del libro Aerobics, de 1968. “Las personas se sienten mejor, quizá por efecto de las endorfinas, sustancias analgésicas que el propio organismo produce”.