¿Alguna vez le funcionó el regateo? La clave está en saber en qué situaciones «corresponde» y cuál es la manera de abordarlo.
Es sorprendente la cantidad de tiendas que ofrecen descuentos si usted los solicita. Solo debe saber qué decir. La mayoría de las tiendas negocian el precio de los artículos grandes como refrigeradores o televisores.
Cuando se trata de artículos de segunda mano, como coches o antigüedades, el vendedor de seguro espera el regateo, y colocará el precio en función a esto.
¿Cómo «rompo el hielo»?
- Establezca una conexión con el vendedor. Sea cálido, pero sin pretender hacerse amigos.
- Por otro lado, no intente obligar al vendedor a que le venda (¡No pienso pagar ese precio!); se trata de llegar a un acuerdo por el precio, no de ganar una discusión.
- Deje en claro que a usted no le gusta perder el tiempo, e insinúe que el precio es solo un pequeño obstáculo para realizar la compra. Diga algo como: Estoy verdaderamente interesado, pero necesito que lleguemos a un acuerdo.
- No acepte la primera oferta: de hecho, no diga nada. Solo muéstrese con dudas o haga una mueca de dolor, y espere a ver lo que el vendedor dice a continuación: es posible que le dé un precio más bajo.
- Busque formas de agregar valor que no afecten el precio: solicite entrega a domicilio gratis si compra electrodomésticos, servicio de post venta por un año o un sistema de música mejor si se trata de un coche.
