Casi todas las razas son el resultado del desarrollo de habilidades instintivas para cuidar o cazar.
¿Por qué hay tantas razas de perros?
El origen de la domesticación del perro se pierde en el tiempo, pero muchos investigadores han llegado a la conclusión de que el lobo es probablemente el ancestro salvaje del perro doméstico. Es probable que los lobos buscaran restos de comida en las cercanías de los antiguos campamentos humanos. Quizá se les tolerara al principio, pero después se les aceptaba gracias a que permanecían en guardia y ahuyentaban a los merodeadores y a otras amenazas nocturnas.
Cuando la relación se fortaleció, el papel del antepasado del perro probablemente se extendió poco a poco de guardián a compañero en las excursiones de caza. Los lobos son animales que cazan en manada, coordinando sus esfuerzos para hallar, perseguir y abatir a la presa. La buena voluntad y la capacidad del perro para responder a las demandas de la cacería fortaleció sus nexos con los hombres. Un lobo quedaba domesticado cuando transfería su lealtad a los seres humanos.
Prácticamente todas las razas de perros eran determinadas según la tarea que realizaban, su lealtad, sentido de cooperación y parecido con sus ancestros. En el siglo XIX surgió una nueva actividad de recreo: la exposición canina. Hoy día hay cerca de 400 razas reconocidas por clubes de criadores de todo el mundo. Casi todas las razas son el resultado del desarrollo de habilidades instintivas para cuidar o cazar. Los pointers y los setters muestran la presa al cazador; los perros perdigueros la recogen una vez que ha sido abatida; los sabuesos rastrean y acorralan a la presa hasta que el cazador llega y la derriba. Los galgos la persiguen en campo abierto, mientras que los terriers penetran en los matorrales para obligarla a salir. Los doberman cuidan las propiedades; los collies y otros perros de trabajo cuidan los rebaños; los huskies tiran de los trineos, e incluso a los perros de juguete, como el chihuahua, el caniche y el pequinés, se les considera valiosos para advertir cuando alguien se introduce en la casa.