En el mundo hay vastas extensiones de tierras bajas cubiertas de ciénagas arboladas o de pantanos donde crecen los pastos.
¿Cómo son las tierras anegadas?
La definición de tierras anegadas -una combinación de aguas estancadas poco profundas y suelos fangosos- además de ser poco precisa enmascara la gran variedad de ambientes que abarca este hábitat. En muchas partes del mundo hay vastas extensiones de tierras bajas cubiertas de ciénagas arboladas o de pantanos donde crecen los pastos. En África, por ejemplo, las grandes zonas regadas por el Nilo Blanco llamadas sudd son pantanos cubiertos de papiros. Por el contrario, las ciénagas o igapos del curso inferior del Amazonas constituyen un bosque que en algunas partes se inunda anualmente y en otras está permanentemente encharcado. El Okefenokee de Norteamérica -el nombre significa «agua temblorosa»- abarca una mezcla de ciénagas cubiertas de cipreses, praderas pantanosas y tremedales.
Aunque no llegue a percibirse, el agua de la mayoría de los grandes pantanos y ciénagas corre lentamente. En África, las aguas del río Okovanggo se extienden sobre la región circundante y la convierten en un gigantesco pantano de agua corriente. En los Everglades de Florida, el agua también fluye imperceptiblemente bajo las hierbas. Estas corrientes lentas, pero persistentes, impiden el estancamiento; además, el tanino destilado por las raíces de árboles como los sabinos, que tiñe de color pardo el agua de los pantanos, ayuda a que se conserve dulce y fresca.
¿Qué ocurre cuando se secan las tierras anegadas?
Las tierras anegadas contienen aguas someras, pero algunas se secan totalmente en ciertas épocas del año, lo que representa un serio problema para la fauna. Ciertas especies han encontrado la solución adaptando su ciclo de vida a estas condiciones. Los anfibios (ranas, sapos y salamandras), por ejemplo, se aparean y ponen los huevos durante la estación húmeda; para cuando la tierra se seca, son ya adultos capaces de respirar aire. Muchos insectos, entre ellos las libélulas, los agriones y las efímeras, se aprovechan también de las lluvias estacionales.
Otra forma de afrontar el problema es la estivación, equivalente en tiempo cálido de la hibernación. En las tierras pantanosas africanas, y en muchos otros lugares, las tortugas, las ranas, los peces pulmonados y los bagres se entierran en el barro antes de que se seque y se endurezca y permanecen allí hasta que las lluvias disuelven otra vez el lodo y quedan en libertad. Los lagartos norteamericanos pasan la estación seca en pequeños pozos llenos de agua que ellos mismos excavan empleando la cola y el hocico. Estos pozos son un gran alivio para el resto de la fauna; alrededor se congregan las serpientes y allí acuden nutrias, mapaches, garzas y cigüeñas de pico amarillo para alimentarse de los peces atrapados en aquella agua que lentamente se va evaporando. Gracias a los lagartos, todos estos animales tienen mayor oportunidad de sobrevivir.