6 consejos para viajar seguro y sin angustia
Los niveles de glucosa en sangre deben mantenerse estables aun en los paseos más cortos. Jillian Paulmark, especialista en nutrición clínica y educadora en diabetes, de Winnipeg, Canadá, brinda cómo lograrlo lejos de casa.
1. LLEVE MEDICAMENTO ADICIONAL y guárdelo en su equipaje de mano por si sus valijas se extravían. Los frasquitos de insulina deben conservarse fríos, así que métalos en una hielera flexible con bolsas de gel frías.
2. BEBA AGUA. Es fácil deshidratarse durante el vuelo o, lo cual puede ser peligroso si sus fármacos lo hacen orinar con mayor frecuencia con el propósito de que el organismo se deshaga del exceso de azúcar.
3. CONFIRME SU DOSIS. Si se aplica insulina de acción prolongada todos los días a la misma hora y planea cruzar más de tres franjas horarias en sus vacaciones, pida al médico que ajuste la dosis para evitar excesos o carencias.
4. LLEVE REFRIGERIOS SALUDABLES. Los frutos secos y las bebidas con alta concentración de nutrientes lo salvarán en caso de que no le ofrezcan suficien-tes alimentos durante un vuelo largo.
Si su nivel de actividad física se incre-menta mucho durante el viaje, deberá alimentarse más a menudo.
5. VIGILE SUS NIVELES DE GLUCOSA EN SANGRE. Las cenas abundantes disparan la glucemia y los recorridos guiados por la ciudad la dejan por los suelos. Por eso es buena idea llevar tiras de glucosa adicionales y usarlas cuando sea necesario.
6. VIAJE CON ZAPATOS CÓMODOS. Cuídese de los lindos zapatos que sacan ampollas o llagas. El calzado deportivo es más adecuado. Y no olvide revisarse los pies todas las noches. La diabetes produce lesiones en los nervios, lo cual impide que note posibles heridas.