¿Son seguros para el organismo? ¿Qué variedades hay? Enterate todo en esta nota.
Los
edulcorantes artificiales se usan para reducir tanto la ingesta de calorías
totales como la cantidad de azúcar consumida. Son mucho más dulces que el
azúcar común, pero en cantidades moderadas dan a los alimentos un sabor similar
al de los endulzantes habituales, como el azúcar o la miel. Como no tienen
calorías, ni causan un aumento de los niveles de azúcar en sangre, son útiles
para personas con diabetes y para quienes tratan de perder peso.
Controle el consumo
diario
Para
que un edulcorante sea aprobado para la venta, tiene que pasar rigurosas
pruebas. La ingesta diaria aceptable es una cantidad media que puede usarse
toda la vida sin causar daño. Se basa en el peso corporal y tiene un amplio
margen de seguridad. Si bien los edulcorantes que están en el mercado son
seguros para el consumo y, cumplen una función importante, en especial para los
diabéticos, hay que ser moderado en su uso. Estos son algunos de los
edulcorantes artificiales más difundidos:
La sacarina es el más
antiguo de los edulcorantes en el mercado. No tiene calorías, es
unas 300 veces más dulce que el azúcar, pero deja un sabor ligeramente amargo.
Varios estudios sugieren que grandes cantidades de sacarina pueden causar
cáncer de vesícula en ratas; no se han demostrado efectos similares en los
seres humanos.
El aspartamo está
formado por dos aminoácidos, la fenilalanina y el ácido aspártico. Tiene las mismas
calorías que el azúcar, pero como es casi 200 veces más dulce, puede utilizarse
en cantidades mínimas. El aspartamo pierde su dulzura cuando es expuesto a
altas temperaturas; por eso, no es bueno para la repostería. Se encuentra en bebidas
sin alcohol, mermeladas, bebidas deportivas y postres. Algunos estudios
sugieren que, en casos aislados, puede provocar convulsiones, visión borrosa o
dolores de cabeza, pero la mayoría de la gente lo utiliza sin problemas. Como
contiene fenilalanina, debe ser evitado por personas con fenilcetonuria.
El acesulfame de potasio
(acesulfame K) es 200 veces más dulce que el azúcar y no tiene calorías. Es muy estable, capaz
de resistir el calor y, en consecuencia, puede utilizarse para repostería. No
se descompone en el cuerpo y es eliminado sin aportar calorías. Se encuentra en
bebidas, mermeladas, chicles y algunos productos de repostería. No obstante,
las personas con dietas restringidas en potasio deberían consultar con el
médico acerca de su uso.
La sucralosa está formada por la sucrosa y es unas 600 veces más dulce que el azúcar. Es muy estable y puede utilizarse en comidas y bebidas, para cocinar y en repostería. Se usa como aditivo en bebidas y alimentos procesados, y como edulcorante de mesa.
Los ciclamatos fueron prohibidos en algunos países, debido al aumento del riesgo de cáncer en ratas de laboratorio en Estados Unidos, pero se terminó aceptando que se usaban en tan pequeñas cantidades que no suponían una amenaza. Se venden en forma líquida, en tabletas y polvo. Este edulcorante se puede usar para cocinar y en repostería sin que pierda su sabor dulce.
Los alcoholes de azúcar son otra categoría de edulcorante, a veces denominados “de volumen”, ya que se agregan a los alimentos como parte del proceso de fabricación. Son derivados de productos vegetales, como la fruta, y se los llama “edulcorantes nutritivos” porque tienen calorías y pueden afectar el nivel de azúcar en sangre. Tienen menos calorías que el azúcar común porque no se absorben bien. Los más comunes son el sorbitol, el manitol, el xilitol, el maltitol y el lactitol. Un beneficio es que ayudan a prevenir las caries. Se encuentran en golosinas, mermeladas y algunos jarabes para la tos.
La estevia es una planta de la especie Stevia rebaudiana de la cual se obtienen varios beneficios como endulzante. Se la puede emplear en extractos crudos (hoja de plantas criollas), así como en presentación líquida o sólida de color oscuro, ya que al ser procesados los extractos en laboratorio podemos obtener un poderoso edulcorante y sustituto del azúcar. El gusto de stevia tiene un comienzo lento y una duración más larga que la del azúcar, y algunos de sus extractos pueden tener un retrogusto amargo o a regaliz en altas concentraciones.
BENEFICIOS
·
Aportan dulzura casi sin calorías.
·
Pueden reemplazar el azúcar en caso de diabetes.
· No
generan caries.
· Las
mujeres embarazadas y que amamantan deben consultar con el médico sobre el uso
de edulcorantes.
· Las personas
con fenilcetonuria no deben usar aspartamo
· En exceso, pueden causar molestias abdominales e inflamación y, además, tener efecto laxante.