En ocasiones es mejor no hacer nada.
Aunque la mayor parte de las personas con este padecimiento no juega tenis, el dolor articular en el codo se denomina “codo de tenista” y afecta al 1,3 por ciento de la población, con mayor frecuencia, a personas entre 35 y 55 años. ¿Cómo combatirlo?
Una investigación probó tres tratamientos: en uno no se hizo nada; en el segundo se usó fisioterapia, y en el tercero, infiltraciones de corticoesteroides. Estos últimos dieron un buen resultado en un inicio, pero con el tiempo fueron los menos eficaces. Luego de un año, el grupo en el que no se utilizó tratamiento alguno manifestó haber tenido una recuperación completa, mientras que los otros dos tuvieron recaídas.
Fuente: British Medical Journal
